El consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, presidió la reunión del patronato de la Fundación Las Médulas, convocada tras el incendio que arrasó parte del paraje. Lo hizo con un mensaje claro: “Levantarse frente a la adversidad. No estamos en un momento de reproche o lamento, estamos en un momento de reconstrucción”.
Santonja explicó que desde el inicio se ha mantenido contacto con la UNESCO, que elaborará un informe junto con el CSIC. Aclaró, no obstante, que este organismo científico “no ha realizado un estudio formal, sino que únicamente ha expresado una opinión”, lo que, según dijo, ha generado malentendidos. En este sentido, calificó de “barbaridad” afirmar que Las Médulas pueden perder el reconocimiento de Patrimonio Mundial de la Humanidad: “Ahora hay unos requisitos para proceder a la restauración y vamos a respetarlos. Pero, ¿cómo se puede decir que se puede perder esa declaración si aún no tenemos un informe solvente? Primero hay que saber hasta dónde llegar y cómo hacerlo”.
El consejero avanzó que se está elaborando un informe “exhaustivo y no coyuntural”, que servirá de guía para las actuaciones desde el CSIC. Reconoció que el paraje contaba con un plan de prevención, pero insistió en la necesidad de avanzar hacia un plan de gestión unificada.
Desde los primeros momentos, dijo, se ha diseñado un plan de recuperación con especialistas de prestigio internacional, a quienes se seguirá escuchando. “Se ha asumido su planteamiento y se va a crear un grupo de trabajo coordinado por la Junta. Es posible que esta misma mañana se nombre al director general que lo lidere”, adelantó.
Santonja garantizó que ya se han liberado los fondos necesarios para iniciar las actuaciones: “No se va a escatimar ningún recurso porque somos conscientes de lo que supone un Patrimonio de la Humanidad”. En este sentido, la Consejería intervendrá en tres ámbitos: recuperación de zonas forestales y limpieza de las áreas quemadas —“que se hará en coordinación con Medio Ambiente, aunque todavía sigue apagando incendios”—; restauración de sendas y señalización; y reconstrucción de infraestructuras dañadas. Entre ellas, el aula arqueológica, que estaba pendiente de remodelación y que ahora “se convertirá en un espacio ambicioso y totalmente nuevo”, además de los miradores de Orellán y de Valiñas, cuya recuperación se pondrá en marcha “de inmediato”.
Finalmente, el consejero pidió evitar la confrontación política: “No vamos a arrojar ni una astilla ni una brizna al fuego de la gresca política. Estamos por el trabajo conjunto, con el espíritu de compromiso, esfuerzo y la decisión clarísima de crecer todos juntos frente a la adversidad”.