Una noticia «difícil» de asimilar para el sector remolachero de la provincia de León sobre la que han sido numerosas las reacciones para mostrar el rechazo «rotundo», tanto de instituciones, partidos políticos, sindicatos o organizaciones agrarias ante el anuncio del cierre de la fábrica de Azucarera de La Bañeza y el despido de 116 empleados.
El alcalde de La Bañeza, Javier Carrera, aseguró a este periódico que el cese de la actividad en la ciudad «es un auténtico desastre para la provincia de León» porque «se pone el fin de una forma de vida». «La remolacha está aquí, en La Bañeza, en sus comarcas y en la provincia de León que es donde más cultivo se produce», lamentó el regidor, que se mostró «sorprendido» de esta decisión.
El presidente de la Diputación de León, Gerardo Álvarez Courel, mostró este martes su «total oposición» al cierre de la planta de Azucarera en La Bañeza, y exigió tanto a la Junta de Castilla y León como al Gobierno central que tome medidas «para evitar este despropósito y ataque a la provincia».
Mañueco pide «reconsideración» a la empresa
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, pidió este martes a la compañía Azucarera que «reconsidere la situación» que le ha llevado a plantear una reorganización de sus plantas en España con el cese de la actividad en La Bañeza, la reducción en Miranda de Ebro y la concentración de la molturación en Toro, y que plantee «una alternativa que garantice el empleo y la actividad económica y agraria vinculada».
«Nos hemos reunido con la empresa y con el comité», defendió Mañueco, que aseguró además que representantes de la Junta pretenden reunirse con miembros del Gobierno de España «para saber sus planes de futuro» y pedirles» que sean los máximos garantistas de los derechos de los trabajadores», de los que aseguró que la Junta va a estar «al lado». Además, añadió que la situación que está atravesando el sector del azúcar se debe a que «cuando se habla mal como hizo el Gobierno de Sánchez, luego ocurren estas cosas», a lo que se añade que «la política mundial hace que se complique esta situación».
Sin embargo, la oposición en el pleno de las Cortes criticó la postura de Mañueco. La procuradora socialista Virginia Jiménez acusó en el Pleno a la Junta de Castilla y León de «no hacer nada» por las fábricas azucareras. La socialista subrayó que el 15 de mayo hubo una reunión clave en La Bañeza pero la consejera de Agricultura estaba en una romería en Ávila. «Así no se defiende a los trabajadores, no detrás de ningún santo», argumentó.
Por su parte, el portavoz de UPL, Luis Mariano Santos cargó también contra lo que ha considerado «un plan orquestado para destrozar» la provincia de León que, según ha recordado, que primero fue León y después Veguellina del Órbigo, y ha lamentado la «permisividad» de la Junta en este caso a los tratados comerciales que no exigen cláusulas espejo.
Y es que, según indicaron desde Unión del Pueblo Leonés, de cómo se ha actuado en anteriores crisis “uno puede concluir la proactividad o no de lo que está haciendo la Junta”, lamentando que en el caso del cierre planteado por Azucarera en La Bañeza por parte de la Junta “no hay ni proactividad, ni sensibilidad con una comarca”, lo que consideró que “no es asumible ni aceptable”, señalando en paralelo que sin embargo se estén realizando por el gobierno autonómico “innumerables actos de propaganda de sus consejeros, pero para reunirse con los trabajadores de Azucarera y plantear soluciones para eso no ha habido tiempo”.
Reacciones sindicales
Por otro lado, UGT, FICA León, mostró su «total rechazo» al cierre de la Azucarera en La Bañeza, que según su secretario general, René Rodríguez, supone «un nuevo varapalo para la provincia y el desarrollo económico en el medio rural» de «un sector estratégico»; a la par que no descartó movilizaciones o huelgas para evitar el cierre de la planta.
Asimismo, las organizaciones profesionales agrarias también criticaron la decisión de Azucarera. Al respecto, Asaja manifestó su «firme rechazo» pide medidas que compensen los costes de llevar la producción azucarera de La Bañeza a la fábrica de Toro. Por su parte, UCCL acusó a la empresa de «dejar en la estacada» a los agricultores y critica que ha «usado» a los remolacheros «y ahora, después de recibir numerosas subvenciones, se deshace de ellos».
"El futuro del sector pasa por Acor"
El presidente de Acor, Jesús Posadas, destacó este martes que el futuro del sector azucarero pasa por la cooperativa radicada en Olmedo (Valladolid), la cual “defiende el cultivo de la remolacha y su rentabilidad por encima de todo”, que sea “estratégico, rentable y seguro en Castilla y León y Álava”, según las declaraciones recogidas por Ical tras la Asamblea General Extraordinaria, celebrada en la Planta de Tratamientos de Aceites y Oleaginosas, en Olmedo.
Posadas, que fue reelegido como máximo responsable de la misma, se refirió a la “reestructuración de AVE Azucarera”, con el anuncio de cierre de la molturadora de La Bañeza (León) y despidos en todas las plantas de España y servicios centrales. Al respecto, consideró que “no es buena ni para Acor ni para el sector”. “Estamos preocupados por las informaciones que llegan, pero la situación de Acor es muy distinta: tenemos solvencia económica que garantiza la rentabilidad del socio y 10.000 hectáreas sembradas que aseguran una campaña normal”, argumentó.
Posadas intuyó que la Junta y el resto de administraciones “defenderán al sector como hasta ahora y, en ese sentido, contarán con Acor”. “El futuro del sector pasa por aquí”, sentenció, para desear que “dentro de un tiempo se puedan ver mejores momentos en el sector de la remolacha”. Sin embargo, admitió que se mantendrán “muy vigilantes para defender los intereses del sector y de los socios”.