Cuatro grupos para intentar acabar con la hegemonía del PP en Valverde de la Virgen

La mayoría absoluta que logró David Fernández (PP)en 2011 con nueve concejales (más dos del PSOE y otros dos de UPL) hacen pensar que en las elecciones del próximo domingo un cambio de tendencia será difícil. Pero a la vez, todos los grupos de la oposición, tanto los que tenían representación como los que no, esperan dar un vuelco a este panorama político que ha caracterizado al Ayuntamiento de Valverde del Camino en los últimos años.

El alcalde, que cumpliría de ganar su tercer mandato al frente del Consistorio, destaca por una parte que no cree que la tendencia contra el bipartidismo le pueda afectar. "Lógicamente, cuando hay ciertas dudas, habrá gente que quiera apostar por esos partidos, pero hay que gobernar al día siguiente", apunta Fernández, que destaca que quizá "se vaya algún voto, pero la inmensa mayoría sabe que esto tiene que funcionar y no valen modas pasajeras ni oportunistas", agrega sobre los nuevos partidos. «Hacen falta candidaturas serias», añade. Por eso subraya que en el PP están convencidos de que "los vecinos seguirán apostando" por los populares, puesto que "todas las personas de la lista son vecinos y viven aquí las 24 horas del día. No hay personas que no estén empadronados ni para rellenar".

El actual regidor también apunta que su programa consta de 40 medidas en las que se incluye la promoción turística del municipio, con especial hincapié en el Camino de Santiago y el santuario de la Virgen, así como el mantenimiento de la oferta deportiva, la actualización del valor catastral de todos los inmuebles y terrenos y la instalación de sistemas para depurar el agua en todos las localidades de Valverde.

"Nosotros estamos trabajando para obtener muy buenos resultados y el objetivo es la Alcaldía, como no puede ser de otra manera", apunta la candidata por el PSOE, Inmaculada Larrauri, que destaca la labor de su grupo durante estos cuatro años, tanto de "crítica a la gestión como de propuestas". "No es fácil ante una persona que lleva dos legislaturas como alcalde", reconoce la dirigente socialista, que se queja de que "ahora resulta que se presenta con un programa con cosas que se le ha reclamado y no ha hecho, pero no lo ha hecho porque es cuestión de ganas", asume Larrauri, que insiste en cambiar la forma de gestionar el Ayuntamiento, donde todo se aprueba en junta de gobierno sin que la información llegue antes a los concejales de la oposición.

Por su parte, el candidato de UPL, Néstor Santos, es pesimista al asegurar que «poco va a cambiar la cosa» en estos comicios, puesto que al principio las nuevas fuerzas sí les habían hecho tener miedo pero ahora ven que "no son tan fieros". En cuanto al gobierno del PP, resalta que este mandato ha sido de "encefalograma plano", ya que apenas ha habido inversiones debido a la gran deuda del Ayuntamiento, a la que se han unido «las facturas que estaban en el cajón» y que tardarán años en pagarse.

"Está complicado entrar, porque Fernández lo tiene todo controlado", explica el candidato de Ciudadanos, Roberto Rodríguez, quien critica que «la gente no está informada de lo que pasa realmente en Valverde, ya que hay cuatro millones de deuda». «La gente está harta porque los de PP, PSOEy UPL llevan más de 20 años», añade el número uno del partido naranja, que acusa al alcalde de «engañar a la gente» cuando promete construir un campo «que puede costar más de 500.000 euros».

"Hay otras prioridades", añade Rodríguez, que enumera algunas iniciativas como"recuperar la acción social", aunque luego "habrá que ver cómo está el Ayuntamiento", y destaca que en su lista "todo el mundo trabaja, no va a ganar dinero al Consistorio".

"Tenemos poquitas opciones, porque somos de izquierdas, y este Ayuntamiento es más de derechas", asume la candidata de Valverde en Común, Justina Fernández, que revela que tienen muy pocos medios para hacer la campaña pero que aún así están recibiendo el beneplácito de los vecinos. En especial de los pueblos más pequeños, que están "en abandono total" por el alcalde, según argumenta, y es donde más necesidades hay. Asegura que hay algunas calles aún sin asfalta y sin alumbrado, mientras que "Valverde se muere porque no hay movimiento".