En la última reunión celebrada este martes entre comité de empresa y Teleperformance, la compañía abrió un listado vinculante para saber quién aceptaría irse voluntariamente, pero con un veto del 20% de los voluntarios. Las personas trabajadoras de Iberdrola, OpenBank, Miravía, Naturgy Ventas, Avanza y Astara no pueden ser parte del ERE por ser «perfil comercial y/o idiomas», así como personas mayores de 50, que también quedan fuera para no tener penalizaciones económicas. Además, el turno de tarde queda limitado a un máximo de 84 voluntarias para no «desequilibrar los servicios».
Por su parte, el sindicato CGT continúa asegurando que no hay motivo para despedir a las 399 personas que pretende la empresa. "Seguimos defendiendo hasta el final que lo más importante es que busquen futuro para todos los centros de trabajo, con nuevas campañas y servicios donde reubicarnos. No podemos seguir teniendo campañas con una enorme carga de trabajo causando estrés y problemas de salud, por lo que queremos alternativas para mejorar la calidad de nuestro trabajo", afirman.
Para terminar, CGT asevera que trabajará hasta el final "para defender los puestos y las condiciones de trabajo, no para hacer negocio con si pagan un día más de indemnización, ya que la principal pelea de un sindicato es garantizar el empleo en las mejores condiciones posibles".