La Junta de Castilla y León ultima, con la de Ambasmestas, en Vega de Valcarce, las obras de humanización en tres travesías de la provincia de León situadas en pleno Camino de Santiago Francés, con el objetivo de mejorar la convivencia entre peatones y vehículos y garantizar la seguridad de los peregrinos. Las actuaciones, que cuentan con un presupuesto de 1.192.548 euros, concluirán en diciembre en los municipios de Vega de Valcarce, con la de Ambasmestas también y Riello. Unas obras que han sido polémicas después de la denuncia del ex edil del PP, José Luis García, que apuntaba que se estaba trasladando a los peregrinos fuera de la calzada “se están colocando quitamiedos por el lado izquierdo, justo por donde transitan los peregrinos”, después de que se eliminaran las aceras y se desviara el paso de los caminantes hacia la parte de la montaña.
Durante su visita a Vega de Valcarce, el consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, destacó que estas actuaciones forman parte de un proyecto más amplio de 30 intervenciones en travesías urbanas de la comunidad, con un presupuesto global superior a 9 millones de euros cofinanciados por la Unión Europea a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR).
En Vega de Valcarce y Ambasmestas, a lo largo de cuatro kilómetros de la carretera N-006A, se ha renovado por completo el firme de la calzada y se han construido nuevos tramos de acera y sendas peatonales, incluyendo un paseo seguro junto a la carretera para proteger a los peregrinos. En Ambasmestas se dispone de acera en ambos márgenes, mientras que en Vega de Valcarce se ha instalado una nueva acera iluminada de 50 metros hasta la intersección con la N-6 cerca de Ruitelán, acompañada de barreras metálicas de protección.
Además, el proyecto contempla la accesibilidad al transporte público mediante nuevas marquesinas, así como la renovación de señalización y barreras de seguridad.
Tambiñen habló de Riello, donde las obras ya han finalizado, se ha intervenido en un tramo de 750 metros de la LE-493, renovando el firme, la señalización y la parada de transporte público. Se han elevado dos pasos de peatones a nivel de acera, instalado una isleta de protección peatonal en el tercero y reurbanizado el entorno para eliminar barreras arquitectónicas, mejorando tanto la circulación como el estacionamiento.
Las actuaciones en León forman parte de un programa más amplio que abarca 30 municipios de las nueve provincias de Castilla y León, con inversiones que oscilan entre 867.629 y 1.192.548 euros por provincia, y que buscan avanzar hacia una movilidad segura, sostenible y accesible en el medio rural.
En la provincia, la Junta ha destinado más de 118 millones de euros a la modernización de la red viaria, incluyendo mejoras de carreteras, carriles bici y estaciones de autobuses, así como inversiones en transporte, logística y tecnología, como el Centro de Supercomputación Scayle, con un presupuesto de 22 millones de euros.