El XIV Encuentro Científico de la Academia del Partal, celebrado en Ponferrada con la participación de 60 especialistas europeos en restauración monumental, sirvió para lanzar una reflexión sobre el cuidado del patrimonio y el futuro de su conservación.
El especialista en conservación y restauración, Antonio Moreno lamentó que el auge de la restauración se esté rebajando tras décadas de avances gracias al respaldo de las administraciones. “Tenemos la sensación de que se acaba el periodo en el que la restauración ha vivido su mejor momento, desde la transición a nuestros días. No sabemos qué pasará ahora”, advirtió, responsabilizando a la administración pública por la falta de servicios de Patrimonio “como los que había hace 20 años”.
El coordinador del encuentro, Javier Ramos, centró la atención en la Tebaida berciana, a la que definió como “un diamante en bruto” que necesita un plan especial de gestión y conservación. A su juicio, si se amplía a la zona de Compludos, abarcaría la mitad del territorio municipal, por lo que instó a unir esfuerzos “más allá de las confrontaciones políticas”.
Por su parte, el concejal de Turismo, Iván Alonso, destacó dos hitos en marcha: la declaración de Ponferrada como BIC en la categoría de Conjunto Histórico y la ampliación del BIC de la Tebaida a los Compludos. Además, subrayó la necesidad de mejorar los accesos a las pequeñas poblaciones, acusando a la Diputación de no hacerlo, y pidió que todas las administraciones se impliquen: “Es una joya que tiene que ser visitada y protegida. Los incendios que antes eran cada 50 años ahora son cada 10, y debemos estar preparados”.
En este sentido, el arquitecto Eloy Algorri, autor del plan de actuación en Montes de Valdueza, defendió que los edificios históricos deben considerarse junto a su entorno natural, “que les da sentido”, como un conjunto inseparable a conservar, de ahí la importancia de esa preservación ante el fuego.
El Castillo, pendiente de señalética
Fernando Cobo, responsable del Plan Director del Castillo de los Templarios, recordó que el proyecto está concluido salvo el acceso adaptado desde La Encina y el programa de excavaciones arqueológicas en la plaza central. Subrayó que lo más relevante ha sido devolver el uso a la fortaleza, “un soporte vivo de la ciudad”, pero advirtió de la necesidad urgente de renovar su señalética: “Todo lo que tenemos que contar está sin explicar sin una visita guiada. Con las nuevas tecnologías podría solventarse de manera rápida y eficaz”.
En cuanto a ese avance tecnológico, Raquel Lacuesta planteó el papel de la Inteligencia Artificial en la arquitectura, aunque concluyó que “no tiene la creatividad ni la sensibilidad de la natural”, por lo que no sustituirá a los procesos de restauración, augurá.
Un Museo de Arte Sacro "fetiche" en Ponferrada
El restaurador, José Miguel Lorenzo avanza en la catalogación de más de mil piezas localizadas en la Tebaida y en la Basílica de La Encina para dar forma al futuro Museo de Arte Sacro. El experto considera que será un museo “fetiche” para Ponferrada, al reunir piezas inéditas y otras que no se muestran desde hace más de 40 años. “Habrá objetos desconocidos y de gran interés”, aseguró en el encuentro que se desarrolló en el Castillo de Ponferrada.

