El incendio declarado el pasado viernes en Llamas de Cabrera se encuentra estabilizado en un 90 %, con un perímetro aproximado de 140 kilómetros, según informaron los técnicos responsables. Aunque el avance de las llamas es ya muy lento, la situación exige aún la intervención continua de brigadas terrestres para afianzar su control.
El operativo mantiene bajo vigilancia varias zonas. En Yeres, el perímetro está igualmente estabilizado, mientras que en el Valle del Silencio, donde el fuego generó la mayor preocupación durante el fin de semana, el cambio de dirección ha frenado el avance. Persisten, no obstante, focos activos en los flancos que miran a Saceda de Cabrera y al campo de tiro del Teleno, donde se trabaja con previsiones favorables que apuntan a su control en las próximas horas.
En Compludo, la orografía escarpada y la presencia de abundante sotobosque complican las tareas de extinción. Los medios aéreos apoyan a los equipos en la eliminación de pequeños focos que, pese a no tener gran extensión, requieren de tiempo para su total liquidación. Los responsables confían en que, si la meteorología lo permite, esta zona pueda quedar estabilizada entre mañana y pasado.
La jornada está siendo especialmente exigente, reforzada con efectivos llegados desde Valencia, el País Vasco y Francia, que se han sumado al dispositivo desplegado en la comarca del Bierzo.