El PP ordena el cierre parcial de su sede en Ponferrada

El Partido Popular modificará el funcionamiento de su sede en Ponferrada después del despido de la trabajadora que se encargaba de la administración en el local.

Un despido en torno al cual se desató cierta polémica en la tarde-noche de este pasado lunes. Y es que la ya ex empleada es la esposa del presidente de la Junta Local del PP de Ponferrada, Juan Elicio Fierro, y es latente desde hace tiempo las confrontaciones de los representantes del PP en Ponferrada con la dirección provincial del partido.

Algunos militantes se encargaron de difundir a través de las redes sociales su malestar ante el hecho de que el partido decidiera cambiar la cerradura de su sede y las malas formas, a su juicio, de comunicar el cese a la trabajadora.

El máximo responsable provincial del PP, Eduardo Fernández, ha explicado que desde su punto de vista «la polémica es artificial y ni siquiera la ha dado a conocer la propia interesada, sino alguien que estaba allí y que se ha alzado en portavoz y parece que se quiere convertir una cuestión puramente laboral en un conflicto político, pero no rehuimos dar explicaciones», apuntó. «No ha habido ni desalojo ni cierre de sede. Hace meses se inició un proceso para ajustarse a la normativa marcada por el partidopor el que se centralizaban diferentes tareas de funcionamiento; no es un tema sólo de León, sino general».

Así, explica Fernández, se ha cancelado la cuenta bancaria de la Junta Local de Ponferrada, como se ha hecho con muchas otras juntas locales y, tanto el cobro de tasas a militantes como las nuevas afiliaciones, cuentas y otro tipo de gestiones se desarrollarán desde León. En este sentido, explica, «procedía el despido por causas objetivas, ya no tenía sentido esa plaza y eso no tiene ninguna lectura de controversia política».

No obstante, el día 5 de enero, el PP provincial recibía la notificación de parte de la trabajadora para solicitar una reclamación de más de un año de nóminas impagadas.

Fernández apunta que la empleadallevaba contratada desde el año 2006 a media jornada y que fue la Junta Local de Ponferrada,dirigida por Fierro, la que firmó su contrato y pagaba sus nóminas «hasta que, por lo visto, hace un año dejó de hacerlo». La dirección provincial se hizo cargo de las nóminas adeudadas (más de 11.000 euros) y ha procedido yatambién al pago de la indemnización (unos 6.000 euros), correspondiente a los servicios prestados durante casi nueve años de trabajo en el partido.

El responsable provincial alega, no obstante, que «flaco favor le hace a la trabajadora que salgan a relucir todos estos datos que, entiendo, se tenían que haber quedado como una cuestión laboral a resolver de manera interna».

Fernández ha explicado que la sede de la calle Ortega y Gasset de Ponferrada seguirá abierta con un calendario de turnos y rotaciones de cargos públicos, orgánicos y militantes, tanto como sea necesario «y más teniendo en cuenta la época electoral que se avecina».

Será el partido a nivel provincial el que se encargue ahora de los gastos y las responsabilidades de esa sede.