Día grande este 24 de mayo de 2025 en Cistierna. Sobre todo, para su vecino José Ramón Gago Bayón y para sus familiares y amigos. Este sábado, en plenas celebraciones de San Guillermo, el joven sacerdote celebró su primera Eucaristía en la iglesia de su pueblo.
La celebraciones del cantamisas ya comenzaron el viernes por la tarde, con el volteo de campanas, una misa vespertina de vísperas y hasta fuegos artificiales programados. No es para menos, José Ramón se ha convertido en el primer sacerdote local en más de dos décadas en esta localidad cabecera de la comarca de la Montaña oriental.
Este sábado inolvidable para José Ramón y los suyos comenzó a las 12:00 horas con la reunión en la casa del nuevo presbítero. De esta manera, guiados por el mayo levantado para la ocasión, hubo una procesión desde la calle Similiano Sánchez hasta la parroquia Cristo Rey por la avenida Constitución, vía principal de Cistierna.
El cantamisas comenzó a las 12:30 horas, en una celebración que tampoco quiso perderse el coro parroquial y que, con besamanos incluido, sirvió para que se otorgara la indulgencia plenaria a aquellos que participasen de la ceremonia religiosa, se confesaran, comulgasen y rezasen por las intenciones del nuevo papa, León XIV. Al terminar, fue el momento para las felicitaciones al nuevo sacerdote, que fue ordenado hace dos semanas en la Catedral de León.
La plaza Carlos Álvarez acogió una comida de fraternidad con platos de paella o de patatas a la salud de José Ramón. Nacido en 1998, los asistentes a este banquete en su honor también brindaron con vino y tomaron postres con el deseo compartido de que la de este sábado fuera la primera de muchas misas que oficie.
Después de estudiar en el colegio y en el instituto de Cistierna, de ser uno más en este pueblo que le vio crecer, José Ramón da comienzo a su etapa como sacerdote de la Iglesia Universal. Con la bendición de San Guillermo, a quien a buen seguro tantas veces habrá rezado, esta andadura no podría haber comenzado de mejor manera para él.