La Ruta del Cares, uno de los itinerarios de montaña más transitados y emblemáticos de España, continúa cerrada en uno de sus tramos debido al desprendimiento registrado la semana pasada en la zona de La Viña, a unos siete kilómetros del núcleo leonés de Caín. El incidente, que inicialmente generó cierta confusión entre senderistas y vecinos, ha sido ya analizado por los técnicos, quienes han confirmado que el origen del problema fue la caída de una gran roca al canal de aguas, una infraestructura de carácter técnico y de propiedad de Repsol.
Un desprendimiento con efecto en cadena
Según explican los responsables del Parque Nacional de los Picos de Europa, el impacto de la gran roca sobre el canal provocó una obstrucción súbita en el conducto, a la que siguieron otras muchas lo que alteró el flujo habitual del agua. Como consecuencia, el caudal comenzó a derivarse hacia el sendero, erosionando parte del firme e incrementando la inestabilidad del material de la ladera.
El golpe de la roca principal vino acompañado de otras piedras y fragmentos desprendidos, que también descendieron por la pendiente, acumulándose en distintos puntos del camino. La mezcla de agua, sedimentos y rocas obligó a los responsables del parque a cerrar preventivamente la ruta por motivos de seguridad, dado que el sendero quedó parcialmente invadido por escombros y presentaba riesgo de nuevos desplazamientos de material.
Trabajos coordinados en marcha
Desde el momento en que se identificó el origen del incidente, los técnicos de Repsol se han encargado de intervenir directamente en el canal afectado, realizando tareas de desobstrucción, reparación estructural y recuperación del flujo normal de agua. Estas actuaciones se realizan bajo la supervisión constante de los trabajadores del Parque Nacional, que monitorizan la ladera y el sendero para garantizar que las operaciones no generen nuevos riesgos y que el terreno vaya recuperando su estabilidad natural.
De forma paralela, los equipos del parque están dedicándose a la retirada de piedras, limpieza del sendero y comprobación del estado del firme, especialmente en aquellos puntos que sufrieron la filtración de agua. También se están realizando mediciones geotécnicas para descartar la posibilidad de movimientos residuales en la zona afectada.
Reapertura prevista en breve
Las autoridades del Parque Nacional han señalado que los trabajos avanzan “a buen ritmo” y que, si no surgen complicaciones meteorológicas o geológicas, la reapertura del tramo podría producirse en los próximos días. El objetivo es que la ruta esté completamente operativa antes del próximo puente festivo, periodo de alta afluencia turística en el que miles de senderistas se acercan cada año a disfrutar del desfiladero del Cares.
No obstante, el parque insiste en que la reapertura no se autorizará hasta que exista una garantía total de seguridad, recordando que se trata de un entorno de montaña en el que los desprendimientos son fenómenos naturales que pueden acentuarse en episodios de lluvia, deshielo o cambios bruscos de temperatura.
Recomendaciones a los visitantes
Mientras continúan los trabajos, las autoridades recomiendan a los visitantes:
- Mantenerse informados a través de los canales oficiales del Parque Nacional;
- No acceder al tramo cerrado bajo ningún concepto;
- Extremar la precaución en otras zonas del entorno, especialmente en días de meteorología inestable.
La Ruta del Cares, también conocida como la 'Garganta Divina', es una de las joyas del Parque Nacional de los Picos de Europa. Por ello, tanto el parque como Repsol han subrayado su compromiso para restaurar la normalidad lo antes posible, preservando al mismo tiempo la seguridad de los visitantes y la integridad del entorno natural.