León dibuja la nueva glorieta para regular el tráfico en la zona del puente de los Leones

La obra, compatible con la circulación, permite ver ya parte de la isleta central y el asfalto en el entronque de la avenida de Palencia con el paseo de Salamanca

18/10/2025
 Actualizado a 18/10/2025
Estado que presentaban ayer las obras de la glorieta del puente de los Leones | SAÚL ARÉN
Estado que presentaban ayer las obras de la glorieta del puente de los Leones | SAÚL ARÉN

El Ayuntamiento de León dibuja la nueva glorieta del puente de los Leones para regular el tráfico en una de las zonas más transitadas de la ciudad.

El avance de las obras en León, que deben ser compatibles con la circulación de vehículos, permite vislumbrar ya parte de la isleta central y el nuevo asfaltado del entronque entre la avenida de Palencia y el paseo de Salamanca, donde ha sido necesario suprimir parte de la zona verde y talar algunos árboles para hacer hueco a la nueva rotonda. Estos trabajos permitirán desviar el tráfico en los próximos días por esta zona ya renovada y comenzar las actuaciones en otro punto del cruce.

Las máquinas avanzan en la remodelación de la intersección, que actualmente está regulada mediante semáforos y que pasará a ser circular, tras una inversión de 616.740,29 euros (IVA incluido). La constructora Excarbi resultó adjudicataria de la obra, iniciada a mediados de agosto, y que cuenta con un plazo de ejecución de cuatro meses (en el pliego se preveían seis).

El Ayuntamiento de León busca con esta actuación mejorar la seguridad vial y reducir los atascos que se forman en determinados momentos del día en esta intersección. Con la supresión de los semáforos, se pretende además evitar la circulación a altas velocidades en una zona muy condicionada por la cercanía de las estaciones de autobuses y trenes, así como por la presencia de numerosos vehículos pesados.

La nueva glorieta del puente de los Leones tendrá un diámetro exterior de 32 metros, con dos carriles de circulación de 5,50 metros y un arcén interior de 0,50 metros. El ancho mínimo de las aceras será de dos metros, garantizando así una mejor accesibilidad y fluidez tanto para peatones como para conductores.

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