Trigo: El lujazo de la sencillez

Homenaje a los productos de la tierra en este restaurante que regentan con mimo los leoneses Noemí Martínez y Víctor Martín junto a la Catedral de Valladolid

Susana Martín
09/10/2015
 Actualizado a 19/09/2019
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A veces es mucho más difícil escribir de lo que mejor conoces. Y de todos los restaurantes que frecuento, éste sin duda es el comedero donde más disfruto y al que más ilusión me hace volver. Por tantas razones... ¿Que me tira la pasión de la sangre? Claro, cómo no, pero está claro que cuando conoces algo bien los adjetivos salen solos. Y de Trigo y la pasión de su equipo por los placeres de la cocina una podría escribir muchas páginas, porque tengo la suerte de haber vivido de cerca el proceso de su puesta en marcha, desde que dejó de ser el sueño de dos leoneses hasta que se convirtió en una realidad para el disfrute de tantos. Y ahora que el Ave por fin nos sitúa a una horita de Valladolid, ya no hay excusas para no visitar Trigo, ‘Mejor Restaurante de Castilla y León 2013’ y hace unos días galardonado en Salamanca con otro premio gastronómico nacional, el ‘Plato de Oro’. La cocina de Víctor es una muestra de su amor por los fogones. De su empeño por conseguir el mejor producto de su tierra, de su paciencia con el trabajo bien hecho y la recompensa de los frutos que van recogiendo tras tanto trabajo en equipo para lograr que quien entre por el portón de madera a un local de suma sencillez viva una experiencia única desde que se sienta hasta que sale por la puerta.Otra leonesa, Noemí Martínez Cabero, ofrece en Trigo un servicio de sala impecable y aconseja entre más de 300 referencias de una bodega variada que incluye vinos muy especiales Trigo es un restaurante pequeño, decorado con calidez en tonos tierra y oro. Un local que desde su propio nombre rinde homenaje a las raíces, a la belleza sin artificios y la sobriedad. Y un poco así es la cocina de esta casa. Con unos fogones que trabajan la tradición de la cocina de toda la vida y conjugan en sus elaboraciones lo más básico del recetario clásico con guiños a las técnicas más vanguardistas de este discípulo de maestros como Santi Santamaría.Aquí se rinden a la naturaleza y ensalzan los productos de temporada en cada carta, que varía cada tres meses y está a punto de cambiar. Siempre ofrecen dos menús degustación, una opción perfecta para quien prefiera guiarse de las recomendaciones diarias del chef que puede maridarse con cuatro vinos. En el menú ‘Como en casa’, picoteo, dos entrantes, pescado o carne y postre. El ‘Festival’ incluye picoteo, entrantes, pescado y carne según mercado, prepostre y postre.Para quienes prefieran bucear en la carta (vean también la de vinos), déjense tentar con una oferta amplísima. Bordan los platos de cuchara, las verduras y los arroces, y en temporada provocan suspiros con la caza y la trufa. Es complicado elegir... Sabroso el taco de perdiz y toques picantes, o las mollejas de lechal con manillas... Encantan la becada, el pichón con trigo, la pata de lechazo rellena de foie y manitas o el canelón de pollo de corral. La oferta de pescados es grande, consulten, aunque soy más bien carnívora y confieso que el plato que en esta casa nunca falta en mi comanda es el steak tartar con habitas: finísimo, una delicia. Postres  muy creativos, prueben con la ensalada de frutas o el Chocolate con Macallan. ______________Restaurante Trigo.                                                                     Los Tintes, 8. Valladolid.                                              983-115500
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