Secundino Llorente

¿Por qué tenemos tantos ‘ninis’ en España?

05/10/2023
 Actualizado a 05/10/2023
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España sigue estando en lo más alto del ranking de jóvenes que ni estudia ni trabaja, los conocidos como ‘ninis’. No deja de ser muy triste encabezar esta vergonzosa lista. La causa es obvia y ‘de cajón’. El abandono escolar temprano es una de las causas que explican la existencia de este colectivo, porque los jóvenes sin estudios tienen muchas posibilidades de quedarse en el paro e inactivos. Los datos sobre la calidad de la enseñanza en la escuela española siguen estando muy lejos de la media europea y revelan un gran problema que requiere reformas urgentes. Mientras tanto, en este país, tenemos otros problemas muy diferentes. Seguimos esperando que los políticos tengan un poco de tiempo para dedicarlo a la educación de los niños españoles, porque los informes que recibimos son cada vez más alarmantes y parece que ya hemos tocado fondo. Tenemos la sensación de que se han olvidado de nuestras escuelas y colegios. Lógicamente, sin una estabilidad política parece muy difícil afrontar las reformas tan necesarias y urgentes. 

Con el inicio de curso, en septiembre, todos los años se publica un informe en el que ‘nos sacan los colores’ al situarnos siempre los últimos, en la cola. La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) presenta una extensa recopilación de estadísticas e indicadores de los sistemas educativos de los 38 estados que la componen. Esta publicación, denominada Panorama de la Educación. Indicadores de la OCDE, analiza la evolución de los diferentes sistemas educativos, su financiación y el impacto de la formación en el mercado de trabajo y en la economía. Los indicadores de la OCDE, en sí, no nos dicen demasiado, pero nos asustan cuando los comparamos con la media de los 25 países de la Unión Europea que pertenecen a la OCDE. Según el informe de este año, nuestro país es el que presenta la mayor debacle de jóvenes con una formación precaria en toda la Unión Europea. El 27 % de ciudadanos, entre los 25 y los 35 años, no ha terminado los estudios de bachillerato o su equivalente de FP. Una cifra que supera la de los países de nuestro entorno y que casi duplica la media de la OCDE, el 14 %. Nos asusta la cifra de 1.400.000 personas en esta situación ‘nini’. Esto significa que dejaron de estudiar en torno a los 16 años y no han retomado los estudios.

El informe de la OCDE, Panorama de la Educación 2023, continúa dando incontables datos estadísticos de los que destacaré alguno como: «En España, el 61 % de los jóvenes de entre 18 y 24 años continúa su formación. Un 21% trabaja mientras no estudia, y un 17 % de ellos ni estudia ni trabaja. Sólo la mitad de estos jóvenes ‘ninis’ está buscando empleo, mientras la otra mitad no pone ningún interés en encontrar trabajo».

«A nivel de la OCDE, en promedio, el 52 % de los jóvenes continúa estudiando, un 31 % trabaja sin estudiar y un 14 % ni estudia ni trabaja. Estos ninis europeos son considerados un grupo de población especialmente vulnerable, ya que cuentan, no solo con menores tasas de empleo y salarios, sino también con problemas de exclusión social».

«En cuanto al empleo juvenil, en general, la mayoría de los jóvenes de 18 a 24 años que están estudiando se mantienen inactivos en el mercado laboral (34 %). En España, donde el 61 % sigue estudiando, solo el 9,4 % combina estudios con trabajo, mientras en Alemania o Noruega esos porcentajes superan el 30 %. Esto se debe a que la actividad laboral de los estudiantes está relacionada con su programa de estudios o realizan prácticas remuneradas en empresas. Eso ayuda a los estudiantes a desarrollar habilidades como el trabajo en equipo y la resolución de conflictos que facilitan su entrada en el mercado laboral».

«En España se da la paradoja de que hay muchos universitarios y gradados en FP superior (el 19,5 % de los jóvenes de 25 a 29 años que tienen un título universitario o de FP superior continúan estudiando, un porcentaje superior al promedio de la OCDE), pero también hay demasiados que no pasan de los estudios elementales».
Por último, hay un dato muy curioso en el informe. Resulta que los alumnos españoles saben menos, pero tienen más horas de clase que ningún otro en la UE. Los de secundaria tienen el 20 % más de tiempo lectivo que la media europea. En cada reforma del currículo (y ya van 8) aumentan las horas. ¿Será para no enfrentarse a los departamentos didácticos? Los horarios son demasiado intensivos en los institutos públicos y con esa densidad rinden menos

Termino mi artículo rogando a los políticos que tomen nota de nuestros malos informes de la OCDE, y estamos esperando el informe Pisa en diciembre, que tememos que nos aseste la estocada final. Sería bueno que, de una vez por todas, ante esta caótica situación, tomen la decisión de reunirse, sin egoísmos y pensando en los niños, para aprobar un gran acuerdo político que articule todo un conjunto de medidas efectivas y contrastadas para salir de este oscuro túnel.
 

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