Ojalá estuviéramos acostumbrados a ver a la Cultural en Segunda o ascendiendo a esa categoría. Que los años por debajo de ella hubieran sido pequeñas pesadillas de las que salir rápidamente, convirtiéndose en un fracaso cada temporada que no lo consiguieras, como le pasaba a Deportivo, Oviedo o Racing. Que te pudieras ver tan encima de esa realidad que no sólo se exigiera subir, sino hacerlo jugando bien y arrasando.
Pero la realidad es muy diferente. Es que, en 51 años, este es tu segundo ascenso a esa división de Plata y será la segunda vez en la que milites en ella. Se dice pronto. Tantos jugadores pasando por León sin conseguirlo. Tantos mazazos en las ocasiones en las que parecía cerca. Tanta gente, como es mi caso, que sólo habíamos podido vivir esto una vez en la vida.
Por eso, me asombra que no se le dé de forma casi unánime el mérito que tiene. “Ya, pero sufriendo”, claro porque lo consigues y estando lejos del equipo de mayor presupuesto y debe ser con margen. “Si llega a durar más la liga no suben”, porque pusieron las 38 jornadas de improviso, no se sabía, también si llega a durar menos le hubieses podido sacar 8 puntos al segundo. “Con una segunda vuelta lamentable”, cuando siendo evidentemente mucho peor que la primera, es la tercera mejor de la Cultural en su última década.
Y creo que al igual que a un Manzanera que hizo un trabajo espectacular para confeccionar la plantilla, o a los jugadores que te llevaron a conseguirlo, hay que dar el mérito que merece al entrenador que te ha llevado ahí, que es Raúl Llona.
Porque al entrenador (un gran tipo, dicho sea de paso) que consigue algo que sólo había pasado una vez en medio siglo, y lo hace siendo líder de principio a final, hay que darle mérito por ello. Y el camino lógico y justo era su continuidad en Segunda con el proyecto que ha conseguido llevar hasta ahí.
No le esperan tiempos fáciles. Ahora pasarás a ser cola de león en vez de cabeza de ratón. Ahora ser quinto por la cola será un éxito y aunque lo consigas será salvo que seas la gran revelación de la liga perdiendo más partidos de los que ganas. Y quien ya está con la campaña en contra por temas personales incluso tras subir, le atizará en cada paso con cada tropiezo.
Que llegarán, claro. Me hacen mucha gracia los del ‘no llega a Navidad’. Preparados para soltar el ‘ya lo dije yo’, sin problema en esconderse si como han hecho con el ‘si no echan a Llona no subimos’ cuando resulta que sí se ascendió.
A ver, sea Llona o cualquier otro, el técnico de un equipo que partirá con uno de los presupuestos más bajos de Segunda y para el que el logro sea salvarse, corre riesgo de no acabar la temporada, ya que la opción de ir mal está ahí. Y cuanto antes seamos conscientes de la dificultad de salvarse en el primer año tras un ascenso, más cerca estará la Cultural de conseguirlo.