Es la Navidad por muchos motivos la época más feliz para los niños, particularmente por que reciben algo que los pone muy contento, como es un juguete. Debido a los controles, la mayoría de los que actualmente se venden en el mercado son seguros, aun así, cada año, muchos niños sufren lesiones, como consecuencia de jugar con juguetes que tienen algún riesgo y lo que podría parecer una diversión inofensiva podría resultar en una lesión seria. Hay un grupo de juguetes sobre los cuales hay que hacer énfasis en el uso y sus prevenciones, entre los cuales se pueden señalar los juguetes de playa y para la piscina, algunos de ellos no son apropiados para usarse como dispositivo de flotación.En la actualidad, hay la proliferación de muchos juguetes que funcionan con pilas de botón y los niños son seres curiosos, exploran el mundo que los rodea y suelen llevarse estos objetos a la boca y tragarlos. Cuando su diámetro supera los 2 centímetros, es posible que se atasquen en el esófago y produzcan daños en las primeras dos a cuatro horas, con el consecuente riesgo de aspiración y perforación. Además contienen sustancias tóxicas, como mercurio, cinc, óxido de plata, litio, cadmio, manganeso, y productos cáusticos, como el hidróxido de sodio o de potasio. Si se abren dentro del tubo digestivo, el material que contienen puede liberarse y lesionar la mucosa digestiva como también producir intoxicación; por último, las pistolas de juguete, los que disparan objetos de plástico u otras piezas voladoras pueden causar lesiones en los ojos, y en el caso de los rifles de aire, aunque normalmente se considera que son juguetes, son peligrosos. Además, jugar con armas de fuego podría causar una conducta más agraseiva y violenta en algunos niños, según desvelan diversos estudios.
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