A modo de preámbulo para la décimo cuarta edición del Congreso Internacional de Molinología (CIMO), el jardín de la Era del Moro acoge la exposición 'Molinos de la ciudad de León', que permanecerá en el enclave de la capital leonesa hasta el 14 de noviembre. La cita, puesta en marcha por la Asociación para la Conservación y Estudio de los Molinos y organizada por la Universidad de León, tiene su inauguración oficial en la tarde de este jueves y contará con 51 ponencias y la participación de cerca de un centenar de expertos llegados desde diferentes puntos de la geografía nacional y de otros países, como Alemania, Portugal y México.
Así lo explicó el profesor universitario, miembro del grupo de investigación Hismecon y director del evento celebrado por primera vez en León, Javier Revilla, que se dio cita con la concejala de Acción y Promoción Cultural, Elena Aguado, y el concejal de Desarrollo Urbano, Luis Miguel García Copete, para presentar la muestra expositiva. "Hemos intentado localizar tanto las presas como los molinos y las hemos dividido en tres espacios: las tres grandes presas", explicó Revilla: "La presa vieja, la presa blanca y, sobre la que estamos, la presa de San Isidoro, que movía el Molino Sidrón, abastecía el monasterio de San Isidoro y luego desaguaba en Papalaguinda, moviendo también otros dos molinos".
En la provincia, a mediados del siglo XVIII había más de 4.000 molinos y, un siglo después, 600 seguían en funcionamiento. Sólo en la ciudad, el Catastro de Ensenda cifraba un total de 14 molinos existentes en el siglo XIX. Esos datos permiten a Revilla referirse a la capital provincial como "una auténtica Mesopotamia entre dos ríos". "En esta exposición temporal, hemos querido plasmar una representación de la importancia molinológica de esta zona", añadió el investigador: "Tenemos presas documentadas desde principios del siglo XII; algo que es casi único en toda Europa... Es una auténtica locura tener presas tan antiguas".
El CIMO, que se extenderá hasta este domingo bajo el lema 'Paisajes milenarios, repertorio de sabiduría', busca fomentar el estudio, conocimiento y protección de los molinos de todo tipo y de todo el mundo, así como de aquellas infraestructuras que utilicen para su funcionamiento las distintas energías tradicionales y de los elementos culturales asociados a ellos. En palabras de la concejala Elena Aguado, "esta ciudad es especialmente adecuada para trabajar y reflexionar sobre los molinos porque no solamente hubo muchos, sino que, además, al tener esta posición natural, la historia no podía hacer otra cosa que una cultura de molienda hasta que se convirtieron en industrias harineras".
Al margen de su faceta industrial, la edil puso de relieve el papel de los molinos y los molineros en otros elementos culturales como la música. Un ejemplo es la canción popular 'A la luz del cigarro', aunque su influencia trasciende a otras ramas del arte. "Está en la literatura... El cuento corto acerca de las bondades y de las riquezas o de los conflictos, porque también fueron objeto de fuertes conflictos, como los derivados de la propiedad y del uso", relató Aguado: "De quién era el molino y quién lo pudiera utilizar era un asunto bastante importante hasta hace bien poco".
El evento, que cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento de León y la colaboración de la Fundación Octavio Álvarez Carballo y el Instituto Leonés de Cultura, además de la Fundación Juanelo Turriano, el Instituto de Humanismo y Tradición Clásica y el grupo de investigación Indetehi/Hismecon -ambos de la ULE-, promete abordar el mayor abanico posible de perspectivas sobre la molinología. Por ello, contará con multitud de estudiosos de la materia, pero también con la presencia de antiguos molineros. "Ahora mismo hay gente que está trabajando en el inventario de molinos por comarcas, por ciudades, por pueblos, así que vamos a tener muchos casos de la realidad actual", apuntó el docente: "Hablaremos de en torno a unos 500 molinos en la provincia con toda seguridad, pero habrá incluso ponencias que nos descubran algunos molinos que no estaban inventariados todavía".
Sobre el Molino Sidrón
El escenario escogido para la exposición, ubicada junto al viejo Molino Sidrón, sirvió de precedente para consultar al concejal de Desarrollo Urbano acerca del estado de las obras de rehabilitación del edificio que en enero de este año adjudicó el Ayuntamiento de León a la empresa Decolesa. En palabras de Luis Miguel García Copete, las intervenciones "van avanzando correctamente" y, previsiblemente, serán finalizadas a mediados de 2026. El espacio estará destinado a la Casa Leonesa de las Letras, que contará con unos 300 metros útiles y servirá como punto de encuentro y de celebración literaria.