Venga, va, para que no me digáis cuando nos vemos en los bares que últimamente me tiro mucho al menú del día y a los platos de cuchara, esta semana volvemos a irnos de excursión, y a un destino que nunca defrauda: Madrid. Desde que tenemos AVE, ya no hay excusas y siempre sobran los motivos, porque anda que no hay allí comederos increíbles que descubrir...Y qué mejor homenaje a todos los futboleros que vibraréis en esa pedazo final del 28 de mayo en Milán que viajar a la ciudad de los dos equipos que pugnarán por la Champions (que gane el mejor... pero ¡Hala Madrid!). Y allí que nos vamos, en tren. Y como la cosa iba de celebraciones y reencuentros emocionantes, nos llevaron a un sitio muy fino que es lo más de lo más para ver –y dejarse ver– en Madrid. Qué escaparate, oigan. Qué sitio más fashion, más bien puesto. Chulísimo, modernísimo, muy pijo. Les hablo del Ten con Ten, un restaurante madrileño imprescindible si lo que buscan es un lugar de moda. Eso sí, acuérdense de reservar, que si no será imposible conseguir mesa. Hay mesas altas siempre disponibles, pero difícil pillarlas también. Nosotros, al cuarto intento, bingo.Como la cosa iba de celebraciones y reencuentros emocionantes, me llevaron a un sitio muy fino que es lo más de lo más en Madrid. Qué escaparate, oigan Una vez allí, en la zona top de una de las ciudades más fascinantes del mundo (centro-centro, barrio Salamanca), deléitense con el panorama tomando un aperitivo en la barra. Miren la decoración, tan súper moderna; y los camareros, tan puestísimos; y la clientela, todos tan, tan... tan.Tomamos una cañita para disfrutar del paisaje (y del paisanaje), y directos a comer. Hay varios espacios, muy bonitos todos, pero optamos por la terraza acristalada, que bajo unos rayos de solete se estaba genial.¿La carta? Extensísima y muy variada. De todo, vaya. Una cocina divertida que tampoco es que sea la bomba, no nos engañemos, pero el nuevo proyecto de los chicos del asturiano El Paraguas (increíble siempre) tampoco defrauda. Producto de calidad, elaboraciones correctas, emplatado impecable, raciones pequeñas y un servicio exquisito. Platos más clásicos, otros más valientes, y rico todo lo que probamos. ¿Algunos ejemplos? Croquetas de Tigre o Faisán, rollitos de pato, arroz frito con zamburiñas, tartar de atún, ceviche Calderón... Ensaladas muy apetecibles, pasta, platos del mar (pescaditos, claro) y de la tierra (las carnes).Como todo tenía buena pinta, le dimos al picoteo, todo para compartir: pinchitos de pollo para abrir boca, y luego risotto con trufa (ay, la trufa), también penne a la trufa y un pescadito para rematar. Una comida inolvidable, regada con burbujas y en la mejor de las compañías. Y de postre, un cóctel para brindar, que había mucho que celebrar. -----------------------------Restaurante Ten con Ten Calle Ayala, 6. Madrid 91-5759254
