Han pasado 20 años desde su primera edición, pero el Festival Internacional León Vive la Magia sigue guardando novedades bajo la chistera. «Siempre hay que dar al público algo que no haya visto nunca», asegura su director artístico, Juan Mayoral, y esta vez no será la excepción. Mantener la capacidad de sorpresa dos décadas después es un reto que se resuelve con maestría año tras año y que ha contribuido a que desde sus inicios –en los que el festival pisó el escenario del Teatro Emperador– haya crecido «en una dimensión impensable entonces». Hoy se posiciona «como el más grande de Europa por extensión y número de actuaciones», hasta 600 solo el año pasado, recuerda Mayoral, que agradece también el respaldo que siguen recibiendo por parte del público. «Las entradas se venden a una velocidad supersónica. Mágica», dice. Tanto es así que cuando falta aún más de un mes para su inicio –se celebrará del 25 de diciembre al 1 de enero– ya se han vendido alrededor del 90 por ciento.
Mayoral, que ha acudido como invitado al programa Entre Nosotras, que emite Cope León en colaboración con La Nueva Crónica, ha asegurado que aunque «la tecnología ha avanzado mucho, como decía René Lavand, el maestro de la cartografía, lo importante es lograr la belleza de lo simple. Aunque nosotros tengamos en nuestras manos el mayor truco de magia del mundo, que es un teléfono móvil, ver a un señor que hace desaparecer algo en tus manos o cómo unas migas de pan pasan de un pocillo a otro es magia pura y la belleza de la simplicidad no la podrá suplantar nunca la tecnología». Ese es el verdadero objetivo, afirma. Este año los espectadores podrán ser testigos del arte y buen hacer de un centenar de ilusionistas de talla internacional procedentes de países como Japón, Canadá o Chile y el peso que ha adquirido el festival ha hecho que en muchos casos sean ellos mismos los que pidan poder participar. «Saben que es un festival ya de mucho prestigio y reputación y muchos que no han venido todavía me escriben para decirme que les gustaría actuar aquí. Lógicamente para mí eso es un lujo», señala Mayoral. Respecto a si hay un artista que se les resista o que no haya podido venir todavía por cuestiones de agenda, el director artístico lo tiene claro: David Copperfield. «No lo hemos ni intentado, pero él está en otra dimensión. Es un supermago en todos los sentidos y, evidentemente, su agenda y sus compromisos, aparte de que está trabajando en Las Vegas con un espectáculo fijo, lo hacen imposible». En todo caso, quiere dejar claro que «la magia tiene un atractivo de por sí» que hace que no importe tanto el nombre del mago o que este sea o no famoso, porque el fin de su número «va a ser ilusionar».
Mayoral destaca también que España «está viviendo un momento fantástico» en lo que al mundo de la magia se refiere. «Los magos españoles han conseguido «varios premios mundiales, algo impensable hace años». «Cuando empezó el festival a la cabeza en el mundo estaba Francia o EEUU y antes de eso, en la década de los 90, era Holanda en donde estaban los mejores magos», asegura. España ha ido ganando peso en los últimos años y este festival, desde hace 20 años, es una clara muestra de que la magia sigue teniendo atractivo. «El público nos espera una edición más y no podemos defraudarle. Tenemos que hacerlo lo mejor que sabemos», promete Mayoral.