Malena Huerga es consciente de que sin el trabajo de campo previo realizado por Jorge y Daniel Lázaro durante años y que dio como primer resultado una exposición que tuvo lugar a finales de la década de los noventa impulsada por la entonces asociación juvenil La Palma esta publicación nunca hubiera visto la luz. «Aquel proyecto en torno a doscientas fotografías –las más antiguas datan de finales del siglo XIX– que habían sido convenientemente digitalizadas por parte de los hermanos Lázaro quedó guardado en un cajón y fue a raíz de la iniciativa de Jorge y Daniel de fotografíar hace dos años a las familias residentes en el pueblo que surgió la idea de hacer este libro», recuerda la presidenta de la Junta Vecinal de Celada, para quien el proceso de selección de las imágenes fue muy complicado. «Con las fotografías en blanco y negro el proceso fue más sencillo porque se han descartado básicamente las que no reunían los niveles de calidad requeridos por la publicación. Sin embargo, a partir de los años 90, al disponer de mucho más material, la tarea ha resultado más difícil, si bien la responsabilidad en este caso ha recaído más en el editor, quien le ha dado un enfoque más comercial con el fin de que pudiera interesar igualmente a personas que no fueran del pueblo», reconoce Huerga.
Interrogada por cuál sería a su juicio la seña de identidad de las gentes del pueblo de Celada vistas las imágenes del pasado y las actuales, la presidenta de la Junta Vecinal no tiene una respuesta clara, si bien quiere dejar constancia de que «Celada es un pueblo de luchadores, de personas inmigrantes que a finales de los sesenta tuvieron que emigrar a Francia, Alemania, Bélgica, Inglaterra... y ahora viven jubilados en el pueblo. Y sí que es cierto que también es muy interesante la temática de la mujer, porque la inmigración lo que hizo fue darle valor a la mujer porque tenía que llevar el peso de todas las actividades de la vida. De ahí que hayamos elegido para la portada una fotografía de las mujeres de Celada, mujeres –como en todos los pueblos– trabajadoras, madres, poderosas, que nunca se rinden y que siempre tiran hacia delante».Sobre la hoja de ruta del libro ‘Imágenes para el recuerdo. Celada’ tras la puesta de largo de este miércoles en la Casa del Pueblo, Malena Huerga comenta que «entendemos que el libro es de consumo interno aunque también se venderá en algunas librerías de Astorga y León, si bien eso ya queda a la elección del editor. La Junta Vecinal en ningún momento va a lucrarse de un producto del que nos sentimos muy orgullosos pero que entendemos que es parte de todos. Todo el mundo ha participado de una u otra manera. Hay personas del pueblo que han aportado textos, otras que han hecho las fotografías y han recopilado durante años, y la Junta Vecinal lo que ha hecho es aglutinar todos estos esfuerzos y hacer que el libro salga adelante», sostiene su presidenta, que reconoce que la demanda de ejemplares por parte de las familias de Celada ya garantiza el éxito de una publicación que reúne alrededor de trescientas fotografías en blanco y negro y en color, algunas de las cuales formaron parte de la exposición de los años noventa impulsada por la asociación La Palma, cuyo presidente, José Ángel Cuervo, es hoy secretario de la Junta Vecinal. «El libro cierra el círculo de 25 o 30 años de trabajo de toda esta gente, pero en realidad tanto el esfuerzo de la Junta Vecinal, como el trabajo realizado por Jorge y Daniel a lo largo de los años y la decisión de las familias de Celada de hacerse la foto hace dos años ha hecho que todos seamos copartícipes de este libro que hoy ve la luz y que se ha convertido en un curioso y al tiempo valioso documento de hermanamiento entre el pasado y la actualidad, una pequeña y humilde aportación más dentro de la gran historia fotográfica de nuestra provincia».