Las 50 grandes empresas de León aumentan sus empleados un 50% en el último lustro

Con la crisis desatada hace ya más de una década las empresas han tenido que redimensionar los negocios, en general, y el personal, en particular. Los recortes de plantilla han sido la tónica habitual en un contexto económico de volatilidad en el que muchos se han quedado por el camino. Lógicamente, las crisis no afectan igual a todos los que la sufren, incluso hay sectores y actores que pueden salir reforzados de los periodos de incertidumbre.

En lo que respecta a las 50 sociedades mercantiles leonesas que más facturan, la crisis no ha supuesto un descenso del nivel de empleo. Al contrario, sus plantillas han aumentado, con más personal contratado actualmente que años atrás. Frente a los recortes de personal generalizados, en algunas empresas han decidido apostar por el aumento de los recursos humanos disponibles, que tampoco significa mejores condiciones o mayor productividad. Simplemente, en lo que respecta a las cifras y sin entrar a valorar las consecuencias específicas o todos los casos particulares, lo que los datos arrojan es un aumento de la mano de obra disponible, de personas involucradas laboralmente en la empresas.

De este modo, según los datos de Eleconomista.es, que especifica públicamente que se nutre de múltiples fuentes de información, públicas y privadas, el número de trabajadores contratados en las 50 empresas que más facturan de la provincia ha aumentado un 50% en los últimos 5 años analizados. El último dato cerrado disponible es del 2017, cuando las 50 mercantiles con más facturación de la provincia empleaban a 4.321 personas, frente a las 2.866 del año 2013. La evolución del nivel de empleo en el sector de empresas analizado ha sido constante en esos cinco años, incrementándose año a año con un aumento total de 1.500 personas empleadas más.

No obstante, cabe precisar que las 50 ‘grandes’ comprenden negocios muy dispares en una provincia con escasa industria, una economía muy terciarizada y con gran importancia del sector primario, así como algunos reductos de actividades extractivas. De este modo, mientras que algunas corporaciones entran en esta clasificación con solo 8 empleados contratados directamente, otras cuentan con plantillas de casi 400 trabajadores. Por otra parte, quedan fuera del conjunto apuntadoalgunas empresas como BA Vidrio o buena parte del sector del telemarketing, que por tener la sede social fuera de la provincia no entran dentro del grupo de estudio, pese a contar con plantillas de centenares de trabajadores. Matizado este extremo, el grupo incluye a prácticamente todas las empresas con sede en León y que facturaron en el 2017 más de 10 millones. Algunas incluso han llegado a doblar la plantilla, como es el caso de Soltra, que según las fuentes referidas, ha pasado de 178 trabajadores en 2013 a 341 en 2017 y actualmente ya cuenta con más de 400, pese a ser una de las empresas afectadas por el cierre de Vestas, a la que prestaba servicios. También Garnica Plywood ha engrosado la plantilla, pasando de 147 a 261 trabajadores.

A la luz de estos datos, las 50 ‘grandes’ se presentan como refugio de empleo en la provincia, en algunos caso con una enorme impacto social. Es el caso de Embutidos Ezequiel que ha pasado de unos 40 a más de 80 empleados, con una fuerte implantación en localidades del medio rural en las que no sobran las oportunidades.
Por otra parte, al aumento del empleo en estas empresas consolidadas se suma el empleo que pueden crear de forma indirecta. En el ranking figuran algunos almacenes de materias primas vegetales o minerales que requieren de transporte y otros servicios que en muchos casos están externalizados, pero forman parte del tejido económico leonés.

El análisis anterior queda validado también por las cifras del Directorio de Empresas que realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según este informe oficial, pese a los cierres de grandes empresas de los últimos años, la provincia cuenta con 5 empresas de más de 1.000 asalariados, cuando en 2013 había dos. También hay una empresa más en el rango de 500 a 999 (3) trabajadores, 6 más de 200 a 499 (19) y 41 más (342).

El rango de pymes en las que se ha registrado un mayor número de cierres entre 2013 y 2018 ha sido el uno o dos asalariados, con el cierre de 828 empresas, de 9.876 a 9.048. También llama la atención el estrato de entre 6 y 9 asalariados, donde se han perdido 122 sociedades mercantiles, pasando de 1.142 en 2013 a 1.020 el pasado año.

En líneas generales, según las cifras oficiales, en el último lustro el número de empresas con actividad —de todos los estratos de asalariados— se ha reducido un 1%, con 344 menos, pasando de 31.620 en 2013 a 31.276 en el ejercicio anterior.

Más allá de los datos, las cifras anteriores son el resultado de los procesos de concentración de la actividad económica y evidencia la mayor capacidad de los negocios consolidados de hacer frente a los periodos de menor actividad económica.