Las localidades de Rimor y Ozuela, que incluye el barrio de Orbanajo, han solicitado su incorporación al servicio municipal de aguas de Ponferrada, con el objetivo de mejorar la gestión, el mantenimiento y la vigilancia del suministro hídrico en estas zonas.
Esta iniciativa responde a las crecientes preocupaciones de los vecinos ante la falta de control en la gestión actual, que depende exclusivamente de recursos locales sin la capacidad técnica ni los medios para garantizar un abastecimiento óptimo. Aunque durante este año no se han registrado averías ni problemas reales de escasez, apuntan, el uso desmedido del agua por parte de algunos usuarios —como el riego excesivo, el llenado de piscinas y el almacenamiento preventivo— ha generado un impacto negativo en los depósitos, especialmente en el de Rimor.
El depósito de Rimor, cuya captación depende del paso por Orbanajo, había sido impermeabilizado y reparado hace cuatro años por la brigada de Medio Rural, una actuación clave para la mejora de la infraestructura local. Sin embargo, el elevado consumo ha provocado que el volumen de agua almacenado no alcance niveles adecuados para el abastecimiento.
La incorporación al servicio municipal permitiría implementar un control más riguroso, mediante el uso de tecnologías de supervisión y la aplicación de sanciones, como ya se ha logrado en otras localidades bajo la gestión del Ayuntamiento. Además, los pueblos contarían con su propio contador y recibo, y estarían bajo la supervisión directa de la empresa concesionaria del agua.
Se espera que, tras el reciente aviso y la recuperación del caudal en el depósito de Rimor, la situación comience a normalizarse en los próximos días. Paralelamente, se iniciarán los trámites administrativos para formalizar la inclusión de Rimor y Ozuela en el padrón municipal de aguas, buscando garantizar un uso responsable y una gestión eficiente de este recurso esencial.