El Obispado de Astorga está estudiando qué fue lo que hizo que se viniera abajo "repentinamente" parte de la bóveda de la Iglesia de Arganza cuando "no había nada que lo hiciera presagiar", asegura el responsable de Patrimonio del Obispado, Victor Murias.
Por suerte, el techo se cayó cuando no había nadie en la iglesia y fueron las mujeres del pueblo que iban a limpiar las que se encontraron con el desastre.
"Fue una situación inesperada", explica Murias, que hizo que los técnicos se desplazaran allí "y se está estudiando cómo realizar la restauración", abunda. Asegura que espera que el arreglo sea "inmediato", puesto que Arganza se queda sin culto y la entrada a la iglesia no es posible, pero también reconoce que "tiene un proceso para conocer primero la causa" y después pasar a solucionarlo.
El regidor, Javier Ovalle, lamenta esta situación pero agradece que hubiera pasado con el templo vacío "hubiera sido una tragedia de otra manera". Y es que, es un hueco de 30 metros en el techo el que se ha caído, sobre 15 bancos que han quedado destrozados y dan cuenta de la tragedia que se ha librado.
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción es un bastión monumental para Arganza y se desconoce por qué se ha caído la techumbre, aunque no se descartan las humedades. Es un templo que ya había sido reparado recientemente. El año pasado se renovó por completo la cubierta y anteriormente la espadaña, por lo que no se apreciaba esta situación límite que ha llevado a su cierre.