La excavación de Las Pedreiras descubre patios y varias habitaciones de la domus

Dos pequeños patios con varias habitaciones alrededor. Esto es lo que se ha destapado hasta el momento en la nueva excavación del yacimiento de Las Pedreiras, en Las Médulas, que ya ha iniciado su segundo campo de trabajo. El yacimiento se excavó e investigó por última vez en los años 90 y, después de muchos años a la intemperie, se cubrió en 2003 para evitar que aumentara su deterioro.

La nueva excavación para volver a sacar a la luz este yacimiento romano tiene el objetivo de consolidar y reparar aquellas partes dañadas y dejar los restos a la vista, ya que se convertirán en otro de los puntos visitables del paraje de Las Médulas.

Los trabajos, organizados por la Fundación Las Médulas a través de tres campos de trabajo dirigidos por un equipo de arqueólogos y responsables de la empresa Arantigua, contarán con más de 60 voluntarios y finalizarán a mediados del mes próximo.

Hasta ahora, según detalla el arqueólogo Rodrigo Garnelo, de Arantigua, que es responsable de las actuaciones junto a Jimena Martínezy a Miguel Lage, se ha descubierto ya un tercio de la excavación realizada en los 90 y los especialistas se están encontrando con que el estado de conservación de los restos es mejor de lo esperado.
«Estuvo años destapado y sin ninguna intervención. La zona estuvo a la intemperie y también sufrió vandalismo, pero de momento estamos viendo que el estado de los muros es bueno, mejor de lo que pensábamos, aunque en algunas partes estamos consolidando los muros donde se ha caído el mortero», explica Garnelo.

La excavación aún tiene por descubrir el patio más grande, el peristilo, que es el que articula la estructura de toda la villa y tiene en su centro un estanque octogonal. Los participantes en los trabajos de recuperación del yacimiento están comenzando ahora a excavar uno de los pasillos porticados que llevaban hasta el peristilo.
En este segundo campo de trabajo, en el que participan sobre todo estudiantes y titulados en arqueología y restauración, hay voluntarios procedentes de varias provincias españolas, entre ellas Sevilla, Murcia, Madrid y Valladolid, además de participantes de la propia provincia leonesa y otros dos procedentes de Polonia que ya participaron en el primer campo.

Los responsables de la excavación destacan que el descubrimiento de los restos de Las Pedreiras y su incorporación a los que ya se pueden visitar en Las Médulas completa el conocimiento de la zona, sobre todo porque la domus que se está destapando es la que mejor expone la presencia romana, ya que se cree que era la residencia de la dirección de la mina de oro de Las Médulas.

Así, el castro de San Juan de Paluezas, que es el más antiguo, es un yacimiento prerromano. El castro de Borrenes estaba en plena construcción cuando llegaron los romanos y sus habitantes cambiaron de ubicación, por lo que quedó inacabado, y el asentamiento de Orellán es ya de época romana, siglos I y II después de Cristo, pero sus habitantes eran indígenas. Y, más que un castro, es en realidad un asentamiento metalúrgico para trabajar el hierro y hacer las herramientas para la explotación. «Por eso la ‘pata’ que nos faltaba era una domus romana, que sería la de los directores de la explotación y, de esta manera, con este yacimiento se cerraría el círculo», estima Garnelo.

Las visitas a esta domus romana permitirán completar y explicar el periodo de ocupación de la zona. La Fundación Las Médulas ha querido aprovechar los campos de trabajo para comenzar ya a hacerlas y mostrar ‘in situ’ a los visitantes cómo se realiza una excavación arqueológica. Las visitas guiadas se realizan todos los lunes y viernes a las 10:00 y a las 12:00 horas, de forma gratuita. La información se ofrece en los centros de recepción de visitantes.