El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado este jueves una subvención directa de 1.061.196 euros para el Consejo Comarcal del Bierzo. La cuantía permitirá financiar, a lo largo de este año y el próximo, diversas actuaciones en materia de protección a la infancia y para el funcionamiento del Centro de Asistencia Ambulatoria (CAD) para personas con problemas de drogodependencia.
En el ámbito de la infancia, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades reforzará los programas de atención y protección de menores. Estos incluyen acciones de investigación, evaluación, intervención y seguimiento, llevadas a cabo por un equipo de profesionales sociales autonómicos. También se garantiza la ejecución de medidas judiciales o administrativas para jóvenes autores de actos delictivos leves o menos graves.
Durante el pasado año se atendió a 155 jóvenes, se ejecutaron 76 medidas con menores infractores -40 administrativas y 36 judiciales- y se intervino en nueve familias de menores en situación de vulnerabilidad. Además, cuatro jóvenes participaron en el programa psicoeducativo de tratamiento para agresiones sexuales.
En lo relativo a la atención a drogodependencias, el CAD del Bierzo, que forma parte de la Red de Intervención en Drogodependencias de Castilla y León, trató en el último año a 293 personas, de las cuales 55 fueron mujeres -diez víctimas de violencia de género-. De ese total, 140 pacientes precisaron tratamiento farmacológico. Asimismo, se elaboraron 43 informes en colaboración con la Administración de Justicia, se ejecutaron 32 medidas alternativas a la privación de libertad y 31 usuarios participaron en programas de orientación laboral y formación para el empleo.
La subvención también garantiza el mantenimiento de la plantilla necesaria para la correcta prestación de estos servicios. En el área de protección de la infancia, se contará con dos psicólogos, tres trabajadores sociales, tres educadores sociales a tiempo parcial y un auxiliar administrativo. Por su parte, el CAD dispondrá de un médico, un psicólogo y un trabajador o educador social a media jornada, todos ellos con formación específica en drogodependencias.
Con esta inversión, la Junta reafirma su compromiso de proteger a la población más vulnerable y de mejorar los recursos de prevención, tratamiento y reinserción en la comarca berciana.