Con la intención de tenerlo listo para que los estudiantes de la EBAU puedan escoger dónde estudiar y dónde quedarse, el rector de la Universidad de León, Juan Francisco Marín asegura que el primer colegio mayor del campus de Ponferradaestará listo para que puedan verla completa este año. Los trabajos de remodelación de la que fue Escuela Hogar van dentro de plazo, después de un tiempo en el que la obra no acababa de concretarse e incluso se ponía en cuestión la idonedad de esta localización.
Finalmente, los trabajos se iniciaron con la ayuda, casi en la mitad del importe de construcción, algo más de 6 millones, de la Unión Europea. Un año se marcaban para realizarlos, plazo que concluye este mes de abril y será cuando se concluya, aunque Marín lamenta que no podrá inaugurar el edificio que él consiguió reactivar, por estar en período electoral para la selección del nuevo rector.
Marín se congratula de que la obra no haya sufrido más contratiempos y se esté ultimando para poder ponerse en marcha en el próximo curso.
La obra obtuvo licencia para iniciarse en febrero del año pasado y comenzó a trabajarse in situ en abril con los técnicos de Incosa y la constructora San José. Se completa así un proyecto largamente perfilado que comenzó ya en la etapa de gobierno de Gloria Fernández Merayo, en 2019, con el convenio firmado por el entonces consejero de Educación, Fernando Rey, el rector, Juan Francisco García Marín y la alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo por el que las tres instituciones se comprometían a crear en la capital berciana una residencia para estudiantes universitarios en el plazo de dos años.
En ese momento el proyecto contaba con un presupuesto de 1,5 millones de euros para reformar las instalaciones de la que era la Escuela Hogar de Ponferrada, en la avenida del Reino de León. Aquello implicó el traslado de los 16 alumnos al colegio Luis del Olmo, en el barrio de La Puebla, que se explicaba que pasaría a convertirse en un centro de innovación educativa.
En ese momento ya se explicaba toda la idea de un proyecto del que finalmente se descalbagaría la Junta y que supondría un coste multiplicado por cinco casi. Se concretaba que se cedería el espacio por 50 años a la ULE, que se encargaría de desarrollar la reforma del edificio de más de 1.000 metros cuadrados de superficie construida, con la previsión de ofrecer entre 65 y 120 plazas. El proyecto concretaba la construcción de un salón de actos para la comunidad universitaria, zonas de recreo y aparcamiento.
García Marín asegura que ya hay alumnos interesados en esta infraestructura aunque considera que es la etapa de finalización de la EBAU cuando el colegio tiene que estar disponible, puesto que es el momento de selección de los alumnos. Sí apunta que el 90 por ciento de los estudiantes del campus de Ponferrada no residen en la ciudad y tres de cada cuatro llegan desde fuera de la provincia de León, lo que justifica esta infraestructura que llega seis años después de la firma del convenio inicial.