El Ayuntamiento de Ponferrada ha comunicado este viernes que el agua de la red municipal dejará de ser apta para la ingesta humana debido a la pérdida de calidad provocada por un derrumbe de grandes dimensiones en la ladera situada junto a la carretera de acceso a Peñalba de Santiago. El corrimiento, originado por las intensas lluvias de las últimas horas, ha arrastrado lodos y piedras hasta el río Oza, afectando a la estación potabilizadora de San Clemente de Valdueza y generando un incremento súbito de la turbidez.
La gravedad de la situación ha llevado al Consistorio a activar el nivel 1 de emergencia de Protección Civil y a convocar al Comité de Coordinación de Emergencias Municipal, que reúne a representantes de todas las administraciones. Los técnicos desaconsejan cortar el suministro para mantener usos esenciales —como el sanitario o el industrial—, pero el Ayuntamiento advierte de que el agua dejará de ser apta para beber de forma inminente. Para priorizar el consumo personal, se ha suspendido el riego, el uso de piscinas y la limpieza de edificios públicos.
Según la evaluación realizada a las 13.15 horas, las zonas afectadas comprenden la parte alta de Ponferrada —excepto Santo Tomás de las Ollas—, además de Flores del Sil, La Martina, La Placa, La Estación, Dehesas, San Clemente, Valdefrancos, San Esteban, Salas de los Barrios, Villar de los Barrios, Lombillo, Campo, Puente Boeza, Manzanedo, Otero y San Lorenzo.
Para garantizar el abastecimiento de agua potable, la Diputación de León ha enviado dos camiones cisterna de 10.000 litros cada uno. En la zona del desprendimiento, la institución provincial ejecutaba obras de emergencia en la carretera LE-5238, trabajos que tuvieron que ser suspendidos por motivos de seguridad debido a la magnitud del corrimiento.
El vicepresidente primero de la Diputación, Roberto Aller, participó en el CECOP convocado por el alcalde, Marco Morala, y reiteró el compromiso de movilizar todos los medios necesarios. Aller afirmó que el acceso a Peñalba sigue garantizado por la carretera LE-6210. El presidente de la institución provincial, Gerardo Álvarez Courel, subrayó que el desprendimiento “no se ha originado por los trabajos” provinciales y pidió unidad entre administraciones ante una situación provocada por las intensas lluvias.
El Ayuntamiento ha habilitado puntos de abastecimiento de agua potable en la Terminal de Mercancías, el aparcamiento de Lidl–Burger King, el Museo del Ferrocarril, la Biblioteca Municipal, las proximidades de la plaza Luis del Olmo y la gasolinera Repsol Montearenas. La situación será reevaluada a las 18.00 horas, y el Consistorio continuará informando de cualquier novedad.