La alcaldesa de Cacabelos ha reducido la deuda del Ayuntamiento en un 64%

Irene González explica la situación de las arcas municipales aportando documentación y comunica la interposición de una denuncia porque no se le ha facilitado información sobre la llamada 'caja B'

23/12/2025
 Actualizado a 23/12/2025
La alcaldesa de Cacabelos, Irene González, en rueda de prensa. | J.F.
La alcaldesa de Cacabelos, Irene González, en rueda de prensa. | J.F.

El equipo de gobierno de Cacabelos, encabezado por la alcaldesa Irene González, ha reducido la deuda del Ayuntamiento en un 64%, aproximadamente, desde los 2,5 millones de euros desde que tomó el bastón de mando hasta alrededor de 0,9 millones en la actualidad. Este es el resultado de su trabajo en tres ejercicios, y además confía en terminar su mandato "cerca de la deuda cero". Por ello, lamenta que "es momento de abrocharse el cinturón" pero asegura que los ciudadanos no sufrirán ninguna pérdida de calidad en los servicios ni tendrán que rascarse el bolsillo para afrontar más impuestos.

Este es uno de los datos que compartió la regidora en una rueda de prensa convocada, sobre todo, para desmentir las acusaciones del portavoz del Grupo Popular en la villa, Adolfo Canedo, que denunció que el Consistorio está funcionando de forma deficiente y con serios problemas organizativos y de gestión, con la falta de cinco de los ocho altos funcionarios clave (como el interventor, la tesorera, el técnico de obras y dos policías locales), y con retrasos en el pago a proveedores y a los trabajadores municipales.

Denuncia por la 'caja B'

No obstante, más allá de la respuesta a Canedo, Irene González mencionó otro asunto novedoso y de actualidad: el Ayuntamiento de Cacabelos ha interpuesto una denuncia en las últimas fechas por falta de información y documentación sobre la caja de tesorería, llamada 'caja B' por el Partido Popular cuando desveló su existencia. A partir de ese momento, la alcaldesa solicitó documentación desde enero de 2021 hasta su entrada como primera edil para analizar la situación denunciada por el PP, pero no se le facilitó. 

La socialista tiene constancia de que esta caja es "una caja de corporación, que es un instrumento que la ley permite que se utilice en las administraciones públicas, una caja de efectivo", aunque los trabajadores municipales a los que le requirió la documentación no se la facilitaron: "Yo solicito esta información en varias ocasiones. Solo tenemos unos informes, pero no la documentación, no me entregan la documentación correspondiente a los movimientos de esa caja de tesorería, y tras las investigaciones a las que podemos acceder, decidimos interponer una denuncia", explicó, subrayando que podría afectar a dos trabajadores municipales.

Falta de interventor y tesorero

La mayor parte de la comparecencia de Irene González estuvo centrada en responder al líder de la oposición respecto a la falta de trabajadores municipales esenciales para labores tan básicas y necesarias como el pago de las nóminas de los funcionarios. Con una pila de folios de documentación oficial para corroborar su versión, explicó día por día toda la labor del equipo de gobierno para tratar de reponerse a bajas inesperadas de funcionarios que dificultan el funcionamiento de la administración local.

Fecha por fecha, Irene González demostró el trabajo de su equipo en cubrir el puesto de interventor y de tesorero después de quedar vacíos repentinamente. Para ello, inició un proceso de selección propio, pidió ayuda al Servicio de Asistencia a Municipios del Consejo Comarcal que fue denegada, y también pidió soporte a la Junta de Castilla y León, pero su bolsa de interinos estaba vacía. En cuanto a la ayuda pedida al ente comarcal, la regidora lamentó que le respondieran que este soporte está dirigido preferentemente a ayuntamientos de menos de 1.000 personas, por mucho que insistiera en que la situación del que preside era "urgente" y que también cumplía las condiciones para recibir la ayuda.

Ante estas dificultades, la solución fue tirar de nombramientos circunstanciales para que otros funcionarios pudieran, al menos, desempeñar las funciones clave de abonar las nóminas de los trabajadores. De este modo pudieron ser pagadas las relativas a octubre, noviembre y la extra de diciembre. Eso sí, son parches provisionales que lejos están de significar una solución definitiva.

En estos momentos, el Ayuntamiento sí tiene "cierta tranquilidad" en el puesto de Tesorería, pues se encuentra trabajando una tesorera por acumulación, pero la Intervención continúa desierta. El Ayuntamiento seguirá recurriendo a nombramientos circunstanciales mientras busca una persona definitiva por todos los métodos que puede.

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