Siempre es complicado elegir un personaje inolvidable de unas sociedades como las SD Ponferradina (y la Cultural) con más de un siglo de existencia. A sus seguidores, dependiendo de la edad, le vendrán a la memoria nombres diferentes. Pero hay aspectos que pesan mucho: años en el club, ser del lugar, generalmente han sido capitanes del equipo y, el fútbol es gol, siempre hay un reuerdo especial para los goleadores.
Todas estas premisas desembocan en un nombre claro en la SD Ponferradina: Marcos Tirone, o Tyrone, que de las dos formas lo encontrarás pero debería primar con y griega si sabemos que el actor favorito de su padre era... Tyrone Power y fue el cura quien impuso el Marcos delante para bautizar a aquel niño. Era 1952 y pocas salidas le quedaban a su su padre más allá de obedecer y conformarse con que el chaval lo llevara como segundo nombre, que siempre utilizó pues es de esos casos que jamás escucharás hablar de él como Marcos solamente.
Sus apellidos eran Castro Fernández, poco utilizados en el ámbito deportivo. Trece temporadas vistió la camiseta blanquiazul (también fue su entrenador), no solo fue el capital sino que cuando sus compañeros le cruzaban siempre le llamaban Capi... y fue el máximo goleador histórico de la Ponfe hasta que en la historia del equipo irrumpió ese Hijo Adoptivo del Bierzo nacido en Brasil, Yuri, que es un caso aparte, una especie de Messi de la Segunda División. Con el añadido para conocer cu calidad que Tyrone no fue un nueve clásico sino lo que en aquellas delanteras de cinco jugadores llamaban un medio derecha. Baste recordar, además de la cifra total de goles (145 ) que en la temporada 1975-76 marcó 32 goles en 35 partidos.
Está además el adios de Marcos Tyrone demasiado reciente. Serán muchos los que lamenten, si se produce el ascenso de su Deportiva, que no haya podido doblegar a su enfermedad hasta ver un nuevo ascenso de su Ponferradina, a la que recordaba haber visto por primera vez con solo seis años, aunque no recordaba nada "pues el campo estaba lleno y yo era un renacuajo".
Apuntó Tyrone alto desde muy pronto, llegó a vestir la camiseta del Real Madrid, pero regresó a su tierra... y aquí se quedó, desde que debutó fente al Zamora en 1972 hasta que se retiró en 1985, después de marcar 145 goles, con un recordado partido homenaje frente a un combinado nacional en el que aparece con el brazalete de capitán el gran Julio Cardeñosa (sí, el del no gol a Brasil).
De ascendencia portuguesa (su abuelo) y con una Guerra Mundial por medio la biografía de Tyrone tiene tintes novelescos, sueños de gloria (cada vez que le veían ojeadores se lo querían llevar, estuvo en el Europa Delicias, el Real Madrid...) y apostó por la Ponfe para integrar aquella delantera que los buenos deportivistas recitan de memoria:Valladares, Tyrone, Eulate, Luso y Herreritos.
Cierto que la Deportiva militaba entonces por la Tercera División, la mayoría de sus temporadas, pero marcar goles es complicado en cualquier categoría. Quizás su día de mayor gloria fuera la eliminatoria de Copa frente an Sporting de Gijón (1980-81)que en Ponferrada ganaron los bercianos por 1-0 y la jugada del gol arrancó sentando Tyrone a un defensa asturiano llamado... Maceda, internacional español y después fichado por el Rea Madrid.
Jamás se desligó del futbol, de Ponferrada y de la Deportiva. Fue entrenador, jugó con los veteranos, también practicó el futbol sala y disfrutó del deporte hasta que una cruel enfermedad le acorraló y derrotó.
Marcos Tyrone falleció el 18 de febrero de este año, después de una dura batalla contra la enfermedad, a la que logró derrotar una vez pero repitió su ataque y se llevó a este futbolista, inolvidable para los deportivistas.