Aunque sigas como líder, cuando tu desventaja se ha reducido desde los nueve puntos que llegaste a sacar en el mes de marzo al segundo a los dos actuales, es inevitable que se abra el debate sobre un posible relevo en el banquillo. Es la ley del fútbol, donde el entrenador es siempre el eslabón más débil, y tampoco lo ha evitado Raúl Llona, con quien las dudas en un sector de la afición están presentes y que ha sido señalado por la actual racha del equipo, que ha sacado sólo 10 de los últimos 30 puntos en juego tras caer 1-0 en Ourense.
Sin embargo, donde no hay dudas es dentro de la Cultural. La confianza en el técnico, que tiene al equipo líder desde la primera jornada de liga hasta la actual 35, es total, independientemente de que se considere que igual que tenía una responsabilidad importante en el gran papel de los mejores momentos del equipo, la tenga también en los malos recientes, sobre todo a domicilio, donde el equipo acumula cuatro partidos seguidos perdiendo y sin marcar un solo gol, y un total de ocho sin conocer la victoria.
Por ello, pese a las conversaciones tras la derrota en Ourense para analizar la situación de cara al tramo final de liga, la continuidad de Raúl Llona está asegurada y se sentará este sábado (20:00 horas) en el banquillo frente al Barakaldo, no valorándose en ningún escenario un cambio de entrenador en este final de liga regular que la Cultural afrontará con dos puntos de ventaja sobre el segundo clasificado a falta de nueve por disputarse.
De momento, desde la creación de la Primera RFEF, los seis equipos que subieron como primeros lo hicieron sin cambiar de entrenador en toda la temporada, un camino por el cual buscará también la escuadra culturalista en este tramo final de liga lograr un objetivo que sigue teniendo en su mano pese a que esté más complicado que hace un par de meses.