La Ponferradina necesita como mínimo un gol para poder estar en la final de la fase de ascenso a Segunda División, aunque de no conseguir más de uno, tendría que pasar primero por una prórroga tras caer 1-0 en Antequera.
Son expertos ya los bercianos en darle la vuelta a la tortilla en las promociones de ascenso y más cuando las vueltas de las eliminatorias son en casa. Ese será uno de los factores diferenciales, El Toralín, y ya lo demostró, además de en esta temporada en eliminatorias como la del Cornellá en 2019 o ante Jaén y Lucena en 2012, todas para acabar ascendiendo a Segunda División. Ahora los de Javi Rey se encuentran en la misma situación, con la misma necesidad y el mismo sueño, ascender.
Y es que en todas las remontadas hay otro factor que marca la diferencia, un gol a los pocos minutos y es seña de identidad de la Ponferradina. Lo hizo en 2012 tras caer en Jaén por 2-0 y en la vuelta lograr marcar el 1-0 a los 23 minutos de partido, no es un gol muy tempranero como los otros que se han dado luego, pero dio esa ventaja antes del descanso. Y con otro gol tras el paso por vestuarios los bercianos pasaban de ronda.
Mismo camino, incluso mejor, tuvieron en la siguiente ronda de la fase de ascenso. Tras caer por 2-0 en Lucena, El Toralín se volvió a vestir de gala en un reto todavía más grande para volver a remontar. Solo 8 minutos tardó Yuri en marcar el primero, que de nuevo le dio la ventaja al descanso al conjunto del Bierzo. Acorán puso el 2-0 en el 53’ y en el 90’ Didac cerró la remontada.
Mateo ante el Jaén a los 23’, Yuri ante el Lucena a los 8’ e Isi ante el Cornellá a los 13’ fueron los goles que iniciaron las remontadas
Tuvieron que pasar 7 años para volver a una fase de ascenso, tras cuatro temporadas en Segunda División, y en la primera eliminatoria, la Deportiva ya necesitó de su factor favorito, ‘El Toralín’. Cayó por 2-1 en Cornellá, lo que obligó a los de Bolo a remontar en casa. ¿Cuánto tardaron? 13 minutos y fue Isi el nombre propio de la tarde, al igual que de toda la fase de ascenso con 4 goles en total. Y tal y como se venía dando en las últimas situaciones, un gol al poco del descanso, le dio la tranquilidad justa a la Deportiva para remontar, aquella tarde fue Kaxe el encargado de poner el 2-0.
En todas las remontadas está el factor Toralín de por medio, como era de esperar, y como no, un gol tempranero en ambas partes del partido. A eso se agarra ahora la Ponferradina que desde este sábado a las 20:30 horas, tiene otra cita con su historia, regresar a una final de la fase de ascenso a Segunda División. Los números de esta temporada avalan al equipo de Javi Rey con 10 goles en la primera media hora de juego y los 20 tantos en las segundas partes de los partidos como local, una vez más siendo fieles a la historia.