Se mire como se mire, es un lugar especialmente privilegiado. El puerto de Vegarada es uno más de los que unen la provincia de León con el Principado de Asturias, pero tiene algo especial. Allí nace el río Curueño que, aguas abajo, forma unas espectacular hoces sobre la caliza de Valdeteja y, después de regar la ribera, se entrega al Porma.
Son cientos, miles, los leoneses a los que les gusta subir hasta este puerto que es también, durante el invierno, un punto de acceso a la estación invernal de San Isidro. Suben muchas personas a menudo, sobre todo los fines de semana, pues es un lugar especialmente indicado para el senderismo, el esquí de fondo, las raquetas de nieve, coger arándanos...
Sus infraestructuras han ido poco a poco mejorando, ahora cuenta con un aparcamiento en las inmediaciones, pero sin duda el gran salto llega este sábado con la reapertura del refugio.
Lleva más de dos décadas cerrado pese a haber sido reformado, pues no era fácil encontrar quién se atreviera a gestionar un negocio a tantos metros de altura. Finalmente, una pareja procedente de Asturias se lanza desde este sábado a darle una nueva vida a la que fue venta, hospital de peregrinos... y, con el tiempo, recuperarán lo que en su día fue: albergue de montañeros. El teléfono para reservas es el 648 633 979.