El esperado acto –que fue suspendido en su primera convocatoria el pasado 1 de febrero- abarrotó el aula. Escolares, profesores, padres y vecinos no quisieron perderse esta entrega de premios tan especial, que contó además con la asistencia del delegado territorial de la Junta, Guillermo Martín, el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo, el director Provincial de Educación, Jesús Víctor Díez Peña, el alcalde de Villamanín, José Luis García Oblanca, el responsable del área de Acción Social de Fundación Mapfre, Antonio García, y la directora del colegio, María Elvira de Paz Suárez. Agradecimientos para la Fundación Mapfre y para la pequeña Marta, pero también peticiones mejorar los recursos en el medio rural. Esta fue la petición que lanzó el alcalde tras agradecer la gran labor de toda la comunidad educativa del colegio de Villamanín.
Con motivo de este premio, la pequeña Marta recibió una tablet, su tutora Luisa Fernández un ordenador que cedió al colegio, y el centro una ayuda económica de 200 euros. Fueron los propios niños del colegio los que dieron lectura al cuento ganador de Marta, un relato que comienza tristemente así «Esta es la historia deun niño llamado Zein Atmani. Tiene 9 años y viene de muy,muy lejos. Vive con sus padres y 5 hermanos en un campamento en el Sahara.Su casa es una tienda de campaña y cuando llueve se inunda, pasan mucho frío y hambre. Está flaco como un palo».
La protagonista del día, la pequeña Marta, no solo no paró de sonreír durante todo el acto, sino que tuvo el valor de ponerse frente a todos los presentes para decir unas palabras. «Estoy muy contenta de haber ganado el premio, pero estoy más contenta de que mucha gente haya leído mi cuento y sepa que hay niños que necesitan nuestra ayuda». La infanta doña Elena fue la encargada de cerrar el acto y lo hizo haciendo referencia al relato ganador de la pequeña Marta, «como dices en tu cuento, si sueñas algo muy fuerte, y con unas ideas y un poco de ayuda, puede que esos sueños se cumplan; os animo a todos a que soñéis por todos aquellos niños que al igual que Zein están en campamentos de refugiados, para que puedan tener una vida mejor».