La Diócesis de Astorga celebra este domingo el Día de la Iglesia Diocesana, una jornada marcada este año por la solidaridad y la reconstrucción. Bajo el lema "Tú también puedes ser santo", la Iglesia centra sus esfuerzos en esta demarcación en volver a levantar los templos devastados por los incendios del pasado verano, que asolaron más de 200 poblaciones y dejaron dos pueblos completamente destruidos: San Vicente de Leira, en Ourense, y Lusio, en la comarca berciana.
El fuego arrasó también la capilla de Cesures y la iglesia de Fervenza, ambas en la Unidad Pastoral de O Barco, y la ermita de Orellán, en Ponferrada. A estos desperfectos a causa del fuego se suma el desplome de la bóveda del templo de Arganza, ocurrido poco antes de los incendios. La reconstrucción de estos templos supondrá un esfuerzo económico superior muy grande", detallan desde la Diócesis de Astorga.
El administrador diocesano, Francisco Javier Gay, recuerda que, aunque se espera recibir ayudas oficiales, estas cubrirán las estructuras de los templos, por lo que será necesario financiar el amueblamiento, retablos, imágenes y elementos litúrgicos. "Recuperar los templos es devolver a los pueblos su identidad", subraya.
La Diócesis hace un llamamiento a la colaboración entre parroquias, recordando que la mitad de sus comunidades tienen menos de 50 habitantes. El administrador diocesano insiste en que "unas parroquias deben ayudar a otras" y, por ello, todo lo recaudado en esta campaña se destinará a la reconstrucción de los cuatro templos afectados por el fuego.
Además, como ejemplo de fraternidad eclesial, las parroquias de la ciudad de Segovia han hecho llegar a la Diócesis de Astorga 10.365 euros recaudados en un acto jubilar, destinados a las parroquias afectadas por los incendios. Un gesto que ha sido agradecido públicamente por la demarcación eclesial, que lo considera "un signo de comunión entre Iglesias hermanas".
Intensa actividad solidaria
Más allá de la emergencia actual, la Diócesis de Astorga mantiene una intensa actividad pastoral, educativa y asistencial. Cuenta con 178 sacerdotes diocesanos, varios ya jubilados, que atienden una media de diez parroquias cada uno, en un territorio que abarca parte de las provincias de León, Zamora y Ourense. De la misma manera, su labor misionera y cultural incluye 242 misioneros y más de 30 bienes inmuebles catalogados, además de 12 fiestas religiosas de interés turístico.
En cualquier caso, como prueba de su carácter solidario, lo que más destaca de la Diócesis de Astorga es su actividad caritativa y asistencial, superando las 15.000 personas atendidas este año en 39 centros. Para desplegar este ingente trabajo en favor de los demás, cuentan con la ayuda de una red compuesta por más de 400 voluntarios de Cáritas y Manos Unidas. En concreto, cabe destacar la labor realizada en los centros de menores, ancianos y drogodependientes, así como en el de las Cinco Llagas, "único en el noroeste de España para personas con gran discapacidad".
Durante el último ejercicio, la Diócesis de Astorga ha registrado ingresos por 8.953.773,71 euros, procedentes principalmente de la asignación tributaria (47 por ciento) y de resultados financieros (24,74 por ciento). Estos fondos permiten sostener la acción pastoral y social, aunque el fondo de reserva disminuirá el próximo año debido a las obras de restauración tras los incendios. Por su parte, en lo relativo a los gastos, la retribución del clero y la conservación de edificios y gastos de funcionamiento se llevan una gran parte.
La Eucaristía del Día de la Iglesia Diocesana tendrá lugar este domingo en la Catedral de Astorga a las 12:00 horas, presidida por el administrador diocesano, con colectas en todas las parroquias de la diócesis este día. La de hoy será, por tanto, una jornada para compartir, ayudar y reconstruir, bajo el signo de la fe y la comunión cristian