La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) llama a los facultativos a secundar la huelga nacional desde este martes 9 de diciembre al próximo viernes y acudir a las concentraciones que tendrán lugar en todas las comunidades autónomas, incluida Castilla y León, para mostrar, una vez más, el rechazo de la profesión al borrador de Estatuto Marco del Ministerio de Sanidad.
Tras valorar el pasado jueves la última propuesta ministerial para modificar el Estatuto Marco recibida por el Comité de Huelga, el Sindicato Médico apostó, por unanimidad, rechazarla y mantener las cuatro jornadas de paro.
Entre otros motivos, aseguró que la profesión requiere de un Estatuto Propio para que el colectivo médico tenga un ámbito de negociación diferenciado e interlocutores propios ante la Administración. “No nos soluciona nada agrupar en un capítulo específico normas que regulen aspectos laborales exclusivos del médico, ni la oferta de crear mesas técnicas exclusivas para abordar problemática del facultativo mientras la composición de esas mesas siga siendo la misma que la de la sectorial controlada por sindicatos poco o nada representativos entre el colectivo médico e incluso con intereses contrarios al mismo”, expuso.
Respecto a la clasificación de los grupos profesionales, CESM criticó en una nota recogida por la Agencia Ical que el Ministerio sigue manteniendo su postura de no diferenciar en grupos distintos a titulados MECES III con titulados MECES II, de tal forma que graduados de 240 créditos con formación especializada podrían tener el mismo nivel que un médico con 360 créditos. En este sentido, lamentó que el nivel de responsabilidad no es tenido en cuenta para la clasificación, con las consecuencias retributivas que ello conlleva.
Guardias, movilidad forzosa e incompatibilidades
Además, exigió que la jornada de guardia sea considerada como una actividad extraordinaria y, por lo tanto, su retribución esté por encima de la hora ordinaria, así como ese trabajo compute como tiempo trabajado para la jubilación. “La Administración pretende que la guardia médica siga siendo el mecanismo para garantizar asistencia completa con plantillas insuficientes. No se nos ofrecen garantías suficientes para que no se siga obligando a compañeros a tener jornadas semanales de más de 45 horas, puesto que el comodín de las necesidades del servicio sigue vigente a pesar de todo”, expuso el sindicato.
También, cargó contra el mantenimiento de la movilidad forzosa y el “letal comodín” de necesidades del servicio que sigue siendo la herramienta para someter al colectivo médico a condiciones laborales “injustas y discriminatorias” con respecto al resto de categorías profesionales.
Por último, se opuso a un régimen de incompatibilidades “discriminatorio”, y al mismo tiempo retribuciones diferentes por igual trabajo, del mismo modo que no pueden permitir la exclusividad de los mandos intermedios. “Un sistema de salud en el que la fuga de médicos es uno de sus principales problemas no puede poner más trabas para atraer talento”, concluyó CESM.