En una entrevista concedida a la televisión de Castilla y León, López recuerda que los trabajos ya acumulaban retraso y que la reapertura de San Marcos es una "prioridad absoluta" para la directiva de Paradores. "Estamos abonando el salario de los trabajadores, porque hemos mantenido todo el empleo de San Marcos a pesar de que superaron un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (Erte) en el que estaban desde hace dos años. Hemos decidido mantener el empleo y pagar las nóminas de los trabajadores a pesar de que el Parador no está abierto. Los primero interesados en que se pueda abrir San Marcos somos nosotros", asevera el presidente de la empresa pública.
Además, López se muestra "convencido" de que "la gente va a disfrutar mucho del nuevo San Marcos". "Van a quedar impresionados, porque está completamente cambiado por dentro y es una maravilla", concluye.
Cabe recordar que la reapertura estaba fijada inicialmente para marzo del presente año. Sin embargo, la aparición de restos históricos y las filtraciones de agua del río fueron demorando los trabajos. La última fecha fijada por la constructora era el pasado 20 de abril, pero el coronavirus se ha encargado de que tampoco se vaya a cumplir.
Hasta que se declaró el estado de alarma (y siempre que la obra se hubiese finalizado en plazo), López preveía que San Marcos abriese en verano, puesto que se estima un plazo de entre dos y tres meses para colocar la iluminación el mobiliario y las cortinas. La UTE integrada por Suinta y Alfonso Merry se ocupará de estas tareas con un presupuesto de 1,2 millones que se sumarán a los más de 15 de la obra.
En una entrevista concedida en febrero a La Nueva Crónica, el presidente de Paradores explicaba que las habitaciones del edificio histórico son "completamente nuevas y respetan absolutamente el estilo arquitectónico". "Se ha hecho un segundo claustro moderno en el que va a estar la cafetería, el lugar de encuentro de aquellos que visiten San Marcos o quieran pasar la tarde y merendar. Además, el cambio de ubicaciones va a dar mucha más espectacularidad al edificio. La recepción estaba a la entrada y junto a la escalera. Eso ahora se va a recuperar como un salón en el que se van a hacer actos, porque la recepción va en otro sitio más apartado", comentaba antes de fijar como objetivo para el presente año tener el proyecto de la segunda fase, la del edificio nuevo y anejo al histórico que sustituirá al demolido al inicio de las obras.
Las peticiones de UPL
A la situación de las obras de San Marcos se ha referido también estos días la UPL, que lamenta el «escaso» ritmo de ejecución de las mismas. "Hay pocos trabajadores y existe la evidencia de que todavía queda mucha obra por realizar para que pueda ser entregada, independientemente de ser conscientes del posible retraso ocasionado por el coronavirus", asegura la formación leonesista antes de recordar que los trabajos ya se habían demorado previamente y de exigir plazos para la reapertura y para la ejecución de la segunda fase "para tranquilidad no solamente de los leoneses, sino también de los propios trabajadores del Parador de San Marcos".