Tras la primera etapa, "la valoración no puede ser mejor, no puede haber más optimismo y no podemos estar más cargados de vitalidad", celebraba Donaciano Dujo, presidente autonómico de Asaja, a la salida de Valverde Enrique. Siguen así reivindicando "precios justos" para un sector sumido en una grave crisis desde la desaparición de la cuota láctea, en abril de este mismo año. Desde entonces, la caída de los precios ha sido constante y los precios por litro de leche son inferiores a los costes de producción y muchas explotaciones se encuentran en una situación límite, abocados al cierre si esto no cambia urgentemente.
Por eso, la Marcha Blanca reivindica "precios justos" y "garantías" para que la industria recoja toda la producción de las explotaciones, para que sobreviva un sector del que depende "mucha riqueza y muchos puestos de trabajo" en la comunidad, como la agricultura, la industria, transporte, transformación...
Celebran también "el apoyo de toda la sociedad y de los medios" y continuarán reivindicando lo que creen "justo" en su camino hacia Madrid, a donde llegarán el próximo cuatro de septiembre "para luchar por cambiar esta situación", pero con el "optimismo de que lo vamos a conseguir".
Tras tres horas y media de caminata bajo el sol, entorno a las 13:30 horas la comitiva ganadera llegaba a su destino en esta segunda etapa, Mayorga, donde se procedió al reparto de leche con el que se finaliza cada una de las jornadas de reivindicación. Unos mil litros por etapa que se dan tanto al principio como al final, e incluso por el camino. Para recompensar el apoyo recibido. Además, en esta etapa y para retomar fuerzas, el Ayuntamiento de Mayorga ofreció a los ganaderos un tentempié para volver a cargar las pilas, que pese a los kilómetros siguen llenas de apoyo.
Los participantes, que esta mañana madrugaron para ordeñar y a primera hora de la tarde volvieron a sus lugares de origen para hacer lo propio esta tarde, fueron llegando a Mayorga, donde sus habitantes se acercaban por el expositor que se instala en cada destino. Unos a preguntar, otros a confirmar lo que habían leído en la prensa, que la 'Marcha blanca' aterrizaba en su pueblo, y otros a colaborar: “Yo quiero comprar un litro de leche, para ayudar”, afirmó un vecino. “No lo pague señor, hoy se la regalamos”, le contestan, mientras colocan a la sombra de las pequeñas carpas instaladas tetra briks de leche de Castilla y León, todas ellas de marcas reconocidas de diferentes provincias de la Comunidad.
La tensión por el conflicto lechero se dejó también notar en Mayorga, cuando alguno de los ganaderos de la localidad se quejaba de que le habían pagado la leche a 0,18 euros el litro y que, cuando fue a alegar a la empresa que le recoge el producto, se lamentaba de que “ni siquiera” le levantaban el teléfono. “No hay derecho. Vaya indignación. Habrá algún día en que nadie hablará con ellos”, comenta un hombre al responsable de una de estas empresas, quien argumenta que a ellos “también” se las pagan a 0,18 y que la culpa no es de ellos, sino que “todos deben estar juntos”. “No te creo”, le responden. Y mientras, la población observa este pequeño debate y se empapa de lo que ocurre: “La gente se está enterando con esta marcha de lo que nos están haciendo. Y lo entienden, son solidarios y están con nosotros. ¡Vaya indignación!”, exclaman los ganaderos.
Este miércoles, la Marcha Blanca continuará con su camino hacia Madrid. A las 10:00 horas saldrán de Ceinos de Campos y tras 19 kilómetros llegará a Medina de Rioseco.
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