El general de brigada Miguel Sánchez Guerrero tomó posesión este martes como nuevo jefe de la Guardia Civil de Castilla y León, en un acto celebrado en León, sede de la XII Zona. En su discurso, el nuevo jefe hizo referencia a la "gran extensión" del territorio de la comunidad autónoma, con más de 94.000 kilómetros cuadrados, y marcada por "el Camino de Santiago, la presencia de zonas de montaña que requieren rescates y reforzar la vialidad invernal y una población altamente envejecida y vulnerable".
Con todos estos condicionantes sociales y físicos, trabajan cada día por la seguridad de todos más de 7.000 agentes en Castilla y León, que han contribuido a mantener "diez puntos por debajo de la media nacional" la tasa de criminalidad de la comunidad, según afirmó en el acto la directora general de la Guardia Civil, Mercedes González, quien propuso personalmente al nuevo general de brigada de Castilla y León.
Sánchez Guerrero reconoció que es "demasiado pronto" para marcarse objetivos concretos, pero sí avanzó las seis líneas generales de sus compromisos con la Benemérita en la comunidad: la proximidad y cercanía al ciudadano, la investigación y prevención, la lucha contra la violencia de género y los delitos de odio, la seguridad en carretera con campañas contra el alcohol y otras drogas, el fomento de la cultura de seguridad ciudadana y la cooperación institucional.

Asimismo, el nuevo jefe de la Guardia Civil recordó el impacto de los incendios este verano en la provincia, en cuya lucha colaboró la Guardia Civil activamente. "Allí donde había que cortar una carretera o auxiliar a algún vecino de los pueblos afectados por las llamas, allí estaba una patrulla de la Guardia Civil prestando ayuda y colaborando con los servicios de extinción de incendios", recordó.
Ya lleva mes y medio en el cargo
Tras mes y medio en el cargo, para el que fue nombrado el 31 de octubre por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y varias reuniones institucionales, como la mantenida con el alcalde de León el 18 de noviembre, el nuevo general de brigada juró el cargo de jefe de la Guardia Civil de la XII Zona de Castilla y León este martes, 16 de diciembre.
El escenario elegido fue el Palacio de Exposiciones de León, cedido por el Ayuntamiento para un acto castrense como este en una jornada marcada por la lluvia, lo que obligó a trasladar un acto que habitualmente se había realizado en el cuartel de Fernández Ladreda.

Sánchez Guerrero, que previamente había sido coronel marítimo de la Guardia Civil en Málaga, toma el relevo de José Antonio Hernández De Luz De las Heras, quien abandonó el puesto para regresar a Valencia, tras solo año y medio al frente de la Guardia Civil en Castilla y León. Su primer destino fue Barcelona en 1992 y procede de una familia de varias generaciones de guardias civiles que ha continuado también su hija, ya en activo como agente de la benemérita.
El acto de toma de posesión fue presidido por la directora general (cargo político) de la Guardia Civil, Mercedes González, que pasó revista a las tropas en primer lugar mientras sonaba el Himno Nacional y contó con autoridades como el coronel jefe de la Guardia Civil en León, Julio Gutiérrez, el alcalde de León, José Antonio Diez, el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, y el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, entre otros.