El presidente de la Asociación Leonesa de Turismo Rural (Aletur), Jesús del Río, destaca que en los alojamientos de los pueblos «ya rondan el 95% de la ocupación» a falta de cuatro días de los que todavía disponen los más dados a reservar a última hora. En este casolos destinos favoritos, y en los que ya es difícil encontrar alguna plaza libre, son los ubicados en las zonas aledañas a las estaciones de esquí de la provincia leonesa. «La nieve consigue que estos alojamientos, si todavía disponen de plazas, se ocupen al 100%», incide.
«Estos días son un balón de oxígeno para el turismo rural», reconoce teniendo en cuenta el mes de diciembre en general, cuando son muchas las personas que viajan en las fechas de Navidad. «Son muy buenas cifras de ocupación pero no podemos olvidarnos que el resto del año la situación no es tan buena y hay temporadas en las que apenas tenemos el 3 o el 4 % de ocupación», lamenta haciendo la cuenta de que «apenas son 55 días de los 365 del año los que tenemos buenas cifras». Eso sí, «cualquier puente de estas características ayudan a la recuperación del sector», apunta.
En la misma línea se pronuncia Jaime Quindós de la Unión Hotelera. «Los días 7, 8 y 9 tenemos ya una ocupación del 97 % aproximadamente», puntualiza y hace referencia a que en gran medida se trata de «clientes asiduos». Entre ellos están muchos aficionados a la música que eligen León como destino durante el puente para disfrutar del Festival Purple Weekend, una cita ya consolidada en el calendario del turismo leonés y que atrae a numerosos visitantes movidos por la oferta musical y cultural de esos días en la capital leonesa. Quindós hace referencia a la meteorología como una de las claves para atraer visitantes y, a pesar de que la nieve en el medio rural es un aliciente para disfrutar de él, en el caso de la ciudad no lo ha sido tanto con alguna cancelación de última hora por el mal tiempo. Aún así, los datos son más que positivos y previsiblemente llegarán al 100% en los próximos días.
Pero además de los hoteles, los bares y restaurantes también hacen estos días el agosto gracias a una mayor afluencia de visitantes y con la gastronomía leonesa como reclamo con la flamante Capitalidad Gastronómica de León para 2018. «Tenemos que aprovecharlo sin matar a la gallina de los huevos de oro. Si lo hacemos bien, seguiremos recogiendo frutos en años venideros. La Capitalidad Gastronómica es mucha más que una tapa en el Húmedo, es un cheque en blanco al portador que no debemos malgastar», sentencia Jesús del Río.