Es una iniciativa que se contempla como una inversión de futuro y que requiere una compleja tramitación administrativa (los plazos iniciales fijaban para este año la conclusión de su primera fase), pero el Ayuntamiento de León sigue dando los pasos necesarios para que sea una realidad. Nos referimos al polígono industrial de la ciudad, que se desarrollará en las inmediaciones de Puente Castro y la carretera de Villarroañe, es decir, en una ubicación que contará con buenas comunicaciones con la circunvalación de la ciudad y con las vías de alta capacidad que enlazan con Valladolid, Burgos, Madrid o Asturias.
Dicha iniciativa servirá para habilitar suelo destinado al desarrollo de actividades económicas y afectará a una superficie de 1.140.000 metros cuadrados, de los que 615.000 metros estarán disponibles para empresas que apuesten por instalarse en sus parcelas.
La tramitación administrativa se había parado a mediados de enero, pero se reactivó en septiembre y el Ayuntamiento de León tiene ya sobre la mesa la propuesta de adjudicación del contrato de servicios consistente en la redacción del proyecto de actuación para el sector de suelo urbanizable denominado ULD 24-01 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad de León, que es en el que se ubicará el polígono industrial de Puente Castro.
El estudio de arquitectura y urbanismo G33 –asentado en Valladolid– será el adjudicatario del contrato por un importe total de 12.0.094,92 euros (IVA incluido) y con un plazo de ejecución de doce meses que se interrumpirá cuando el proceso de redacción del proyecto de actuación requiera alguna decisión o trámite por parte del Ayuntamiento de León o de cualquier otra administración pública, tal y como figura en la propuesta, que deberá ser ratificada por la Junta de Gobierno Local.

La tramitación administrativa para impulsar el polígono industrial de Puente Castro –considerado por parte del equipo de gobierno como un elemento clave para el futuro de León– arrancó a principios del año 2021 con la elaboración y aprobación de los instrumentos de planeamiento urbanístico y continúa ahora con la aprobación de los instrumentos de gestión, entre los que destaca el proyecto de actuación que ahora se va a encargar por parte del Ayuntamiento.
Este documento contemplará la reparcelación del espacio previsto, que deberá posteriormente ser expropiado, y también fijará las condiciones básicas de urbanización en consonancia con la legislación autonómica en materia de desarrollo urbano. El contrato incluirá otro tipo de prestaciones complementarias de asistencia a los servicios técnicos y administrativos municipales en orden a la correcta y eficiente ejecución de estos instrumentos de gestión urbanística que permitirán que la ciudad disponga de suelo industrial propio.
En este sentido, además de en la redacción de los documentos del proyecto de actuación y su tramitación administrativa y de información pública, la asistencia técnica por parte de G33 se centrará en el proceso expropiatorio y en la liberación de aquellas parcelas de la zona en las que ya se desarrollan actualmente actividades económicas.
Una vez concluido este proceso, tocaría redactar el proyecto de urbanización del polígono industrial, cuya materialización se había planteado en tres fases. En todo caso, el alcalde de León, José Antonio Diez, ha asegurado en diversas ocasiones que no se ha decidido cómo se gestionará el suelo, si mediante un convenio con la Junta o con acuerdos con empresas que quieran instalarse y se encarguen de la urbanización
