Los 160 trabajadores de la planta de Azucarera en La Bañeza realizaron este miércoles por la mañana la primera concentración a las puertas de la misma para oponerse al cierre de la fábrica y mostrar su rechazo al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) anunciado por la empresa.
Una concentración que contó con el respaldo también de vecinos de la ciudad y de buena parte de los partidos políticos que conforman la corporación municipal del Ayuntamiento, así como la presencia del alcalde, Javier Carrera, junto a otros representantes del mundo agrario que estuvieron presentes en esta primera convocatoria.
En la protesta, el presidente del comité de empresa, Benigno Pérez, aseguró que van a luchar frente al cierre de la planta de La Bañeza “aunque las posibilidades sean mínimas”. “Vamos a intentar con todos nuestros medios evitarlo y por eso pedimos reuniones a la Junta de Castilla y León y a los ministerios de Agricultura y de Trabajo para buscar una solución”, indicó.
Al respecto, Pérez señaló que “si se cierra la fábrica de La Bañeza se pierde mucho empleo en una zona en la que no hay trabajo y no se va abrir nada nuevo”, a lo que añadió: “no podemos permitir que se siga destruyendo empleo en las zonas rurales”. Por ello, pidió “más implicación si cabe” a todas las administraciones a todos los niveles, así como a todos los partidos políticos “que solo se preocupan de la España rural cuando tienen que pedir el voto”.
“Solo piensa en el azúcar”
Por otro lado, el presidente de comité de empresa criticó que AB Foods, multinacional que es propietaria de Azucarera, así como de la tienda de ropa Primark, “solo piensa en hacerse con el mercado de azúcar, la remolacha le da igual”. “Va a inundar el mercado de azúcar a través de refinar caña en crudo y apostará por hacerlo en la fábrica de Jerez de la Frontera y en cuanto empiece a funcionar la de Miranda, me temo que los trabajadores que dependan de la refería de remolacha acabarán en la calle”.
En ese sentido, Pérez lamentó que “Azucarera no apuesta la remolacha porque es incomprensible que cierres la planta de La Bañeza teniendo el cultivo al lado de la puerta”.
Asimismo, indicó que este jueves mantendrán una nueva reunión de la mesa negociadora entre sindicatos y Azucarera “donde no esperamos novedades por parte de la empresa más que más datos de su decisión”. Igualmente, solicitaron a la Junta de Castilla y León que “oferte la fábrica a un nuevo inversor que se quede con el mercado de la remolacha y que azucarera se vaya al mercado del azúcar importado”.
Unidad de acción
Benigno Pérez, en representación de UGT-Fica, también avanzó que ya cuentan con el apoyo de las organizaciones profesionales agrarias de la provincia de León para la concentración en la plaza Mayor de La Bañeza del próximo viernes 6 de junio a las 20:00 horas donde también animó a participar a toda la ciudadanía.
En la misma línea, indicó que su próxima protesta será frente a las Cortes de Castilla y León el martes día 10 coincidiendo con el pleno y pondrá varios autobuses para que puedan ir a protestar todos los trabajadores.
No obstante, Pérez señaló que siguen trabajando para convocar nuevas movilizaciones fuera de La Bañeza. “Creo que tenemos que ir a León para darle más visibilidad a nuestra situación, al igual que más adelante habrá que ir a Madrid”, manifestó.
Por otro lado, también tomó la palabra en la concentración el representante de CCOO en el comité de empresa, Joaquín Pisabarro, que compartió todas las palabras de Benigno Pérez, aunque matizó que “hay que ser claros y tenemos que tratar de negociar con la empresa porque nos han presentado un ERE y lo que se necesita es recolocar a todos los trabajadores en las mejores condiciones posibles”.
“Llevo muchos años en la Azucarera y he visto muchos cierres en los que han pasado muchos políticos de turno por las instalaciones sin evitar el cierre”, por lo que reclamó “más implicación” por parte de la clase política; a pesar de que agregó que “Azucarera es una empresa privada y puede tomar las decisiones que quiera, pero hay que negociar las mejores condiciones posibles si decide cerrar la planta”. "Hay que ser realistas y tenemos que estar preparados para cualquier escenario", concluyó.