Dicen siempre las abuelas que lo peor de la guerra es el hambre. Y el hambre saca lo peor de las personas. Un círculo vicioso que conocen bien en lugares como Gaza o Siria, pero que en lugares en paz como León es también una realidad para las cerca de mil familias que el Banco de Alimentos calcula que este año acudan a su almacén buscando ayuda. Una ayuda que algunos solicitan «con el rostro semicubierto», por vergüenza, y que otros cargan «ya no en carritos de la compra, sino con grandes maletas».
Lo explica Juani Pérez, responsable del Banco de Alimentos de León, que alerta que «cada vez viene más gente y se nos acaban las existencias». Por este motivo, hace un llamamiento a la solidaridad de los leoneses para «donar lo que se pueda» en la gran recogida de primavera que este viernes comienza en todos los supermercados de la provincia y que se extenderá hasta el domingo.
Es la conocida como ‘operación kilo’, sin la cual no se podría atender a las familias que acuden a este servicio caritativo. El año pasado fueron 850 familias las que recibieron alimentos, algunas en reiteradas ocasiones. En lo que va de este año 2025 Juani lamenta que han venido ya «más de 500 familias, es decir, 100 más que hace un año por estas fechas».
Ante estas alarmantes cifras, el objetivo de la gran recogida de alimentos de primavera es volver a llenar la despensa solidaria de la entidad, pues «no queda ni un solo euro de la campaña de noviembre», la que cada invierno moviliza a miles de leoneses con el frío y la Navidad en el horizonte y en la que llegan a recaudar hasta 90.000 euros.
Es preciso recordar que, desde la pandemia, la recogida no es en especie, es decir, ya no se recogen –salvo excepciones– los alimentos en las grandes cajas que antes colocaban los supermercados en las puertas, sino que la donación es económica al pasar por caja. «Lo hicimos así para organizarnos mejor y adaptarnos a las necesidades de cada momento de los usuarios, pero es cierto que llegan menos donaciones que cuando la gente dejaba los alimentos en físico», relata Juani.
Perfil de los usuarios
Respecto al perfil de personas que solicitan la ayuda del Banco de Alimentos de León, Juani indica que el 55% son extranjeros y el 45% restante son españoles. No hay un perfil tipo de usuario, pues al almacén ubicado en el entorno del depósito municipal de vehículos acuden tanto familias completas, como familias monomarentales y personas solas.
«Estamos observando que llegan muchas personas del medio rural, mujeres extranjeras víctimas de la trata y también migrantes sin permiso de residencia que no son atendidos por las administraciones ni por Cáritas y acuden a nosotros», explica Juani. «Lo peor es cuando nos llaman desde los centros de salud porque les ha llegado a urgencias un niño que está mal, que al principio no saben qué le pasa y lo que le pasa es que está hambriento y necesita de la ayuda del banco de alimentos», añade.
Así, con el objetivo de superar los 50.000 euros en donaciones recibidos en los dos últimos años, los seis voluntarios del Banco de Alimentos de León se repartirán hasta el domingo en diferentes supermercados para tratar de fomentar la solidaridad de los leoneses. «Que tengan claro todos los leoneses que cada céntimo que donen en los supermercados irá a personas que están pasando hambre», concluye Juani.
A vueltas con el IVA
Una de las principales reivindicaciones de los Bancos de Alimentos de España es que estén exentos de pagar el IVA cuando compran alimentos con las aportaciones monetarias de los donantes particulares, empresas e instituciones. Según la Asociación Nacional de Alimentos Solidarios (Andas), esto supone un pago anual –a nivel nacional– de 3,5 millones de euros, «que lógicamente podrían destinarse a donar más alimentos».
En ese sentido, la asociación celebra que hace un mes salió adelante, en la Ley de Desperdicios, la enmienda que recoge la eliminación del IVA en las donaciones de alimentos. Así, el BOE del 2 de abril recogía que se aplicará esta medida«en el menor tiempo posible».