Más de un centenar de jóvenes de la Diócesis de León han partido esta mañana desde el aparcamiento de San Pedro, a los pies de la Catedral, rumbo a Roma para participar en el Jubileo de los Jóvenes 2025, bajo el lema “Peregrinos de Esperanza”. Integrados en el grupo de Pastoral Juvenil-PASJU León, los participantes afrontan un viaje de más de treinta horas en autobús para unirse a esta gran cita de la Iglesia universal, que culminará el domingo 3 de agosto con la misa de clausura presidida por el Papa León XIV.
La peregrinación comenzó simbólicamente ayer lunes con una misa de envío presidida por el obispo de León, Luis Ángel de las Heras, en la Catedral. Durante la celebración, el prelado entregó a cada joven una pañoleta bendecida con la leyenda “PASJU-Diócesis de León”, que servirá de distintivo en su paso por la ciudad eterna.
En su homilía, el obispo destacó que “peregrinar es ponerse en camino, estar dispuestos a la conversión, a pensar menos en nosotros y más en los demás”. Animó a los jóvenes a vivir esta experiencia como “peregrinos jóvenes y alegres, discípulos misioneros de Jesús” y les recordó que “toda la Diócesis se pone también en camino con vosotros, para que os sintáis como granos que hacen el mismo pan, no como peregrinos solitarios”.

La delegación leonesa vivirá una intensa semana en Roma, donde el jueves cruzarán la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro y el viernes participarán en el encuentro de jóvenes españoles en la plaza vaticana, presidido por el arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello.
El sábado se trasladarán a Tor Vergata, espacio que acogerá los actos centrales del Jubileo, con una vigilia de oración junto al Papa León XIV y la celebración de la misa final del domingo, el primer gran encuentro del pontífice con jóvenes de todo el mundo desde su elección.
“Estamos muy ilusionados, es una oportunidad única”, aseguraba esta mañana Carmen Aragón, una de las jóvenes peregrinas. Por su parte, Álvaro Prieto, uno de los coordinadores del grupo, subrayó que este momento “culmina un curso entero de preparación con vigilias, convivencias y encuentros con el obispo. Queremos conocer al nuevo Papa y compartir la fe con jóvenes de todo el mundo”.
La salida desde León estuvo acompañada de cantos, oraciones y la bendición del coordinador del Área de Pastoral Juvenil, Thierry Rabenkogo, quien acompañará a los jóvenes junto a varios sacerdotes. Entre bromas y emoción, el obispo Luis Ángel dejó ayer un encargo muy especial: “Cuando veáis al Papa León, le dais recuerdos del obispo de León”.