Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de León en colaboración con la Comisaría Local de San Andrés del Rabanedo han procedido a la detención de tres personas por delito contra la salud pública y al registro de dos domicilios en los que se realizaban transacciones de sustancia estupefaciente.
La investigación que comenzó este verano, concluyó el pasado viernes con la detención de los implicados y el registro de sus domicilios.
Diversas denuncias anónimas, señalaban a un varón con residencia en la localidad de San Andrés del Rabanedo, que se dedicaría a la compra venta de sustancia estupefaciente, actuando en dos domicilios de la localidad.
Este varón con diversas reseñas policiales y antecedentes por tráfico de sustancias estupefacientes realizaba contactos discretos con pequeños consumidores a los que surtía de droga a cambio de dinero.
La investigación policial pudo determinar como este varón y su familia tenían un alto nivel de vida comparado con sus ingresos. Ostentaban excesivamente y conducían vehículos de alta gama. Además en sus desplazamientos en vehículos realizaban medidas de contra-vigilancias, actitudes evasivas y excesivo celo ante posibles seguimientos.
Sus conversaciones telefónicas eran codificadas cuando realizaban transacciones u operaciones de droga y utilizaban dos domicilios, el de la pareja y el de la hermana del varón que era utilizado como lugar de ocultación del grueso de la sustancia estupefaciente.
Previamente a la detención se habían realizado diversas actas de consumo e intervención de sustancia estupefaciente a sendos clientes, se habían controlado y seguido los pasos del cabecilla de la trama (el varón) e incluso se había detenido en alguna ocasión al mismo por hechos relacionados con los que nos ocupan.
Se registraron dos domicilios, interviniéndose un total de 521 gramos de cocaína, 3680 euros, balanzas de precisión efectos relacionados con las drogas, y tres vehículos (dos de ellos de alta gama)
Las dos mujeres detenidas, pareja y hermana del principal implicado, fueron puestas en libertad tras su declaración, puesto que tenían hijos menores a su cargo. El varón fue puesto a disposición judicial, decretando el Juzgado de Instrucción de Guardia su ingreso en prisión.