Sin balas y disparando

El fotógrafo Gus Geijo es uno de los leoneses con más seguidores en las redes sociales. Su trabajo es seguido por miles de personas con las que comparte además el ‘back stage’ de sus fotos

T. Giganto
26/08/2017
 Actualizado a 11/09/2019
Gus Geijo es uno de los leoneses con más seguidores en las redes sociales, su mejor escaparate. | MAURICIO PEÑA
Gus Geijo es uno de los leoneses con más seguidores en las redes sociales, su mejor escaparate. | MAURICIO PEÑA
De él se podría decir eso de que «donde pone el ojo, pone la foto». Un dicho versionado para un fotógrafo que no se conforma con disparar y que se empeña en sacar lo mejor de la persona que se pone delante de su cámara. Hay pasión en su trabajo e ilusión, la misma que desde el primer día. Es Gus Geijo, el fotógrafo leonés que se ha colgado la cámara al hombro para saltar el charco y hacer una sesión al tenista Rafa Nadal, el mismo fotógrafo que abre las puertas de su estudio para enseñar desde cero a utilizar una cámara réflex. Allí, en ‘The White Room’, las modelos consiguen mostrar su mejor versión y quienes no lo son encuentran en Gus el mejor ‘caza recuerdos’ para momentos como el embarazo o el día de tu boda.

Todo ello lo cuenta Gus a través de sus redes sociales. "Para mi son uno de los mejores escaparates en el que enseñar mis fotos", cuenta este fotógrafo leonés que tiene más de 17.000 seguidores en su página de Facebook (Gus Geijo Fotografía) y casi otros tantos en Instagram (@GusGeijo). Es en esta segunda red social en la que ha abierto una nueva cuenta (@GusGeijoBTS) en la que desvela lo que hay detrás de cada instantánea, los esquemas de luz, el material utilizado... "La idea surgió porque me preguntaban mucho cómo hacía las fotos y me planteé mostrar cómo trabajo para que así otras personas puedan aprender", explica Geijo, quien sabe de ese lado oscuro de las redes sociales. "A veces crean un mundo irreal en el entorno de las personas que no saben funcionar con ellas y a mí personalmente me han privado de vivir en la ignorancia que me gusta", opina Gus, que a pesar de ello es consciente de que para él es una buen herramienta con la que llegar a más personas.

Ya ha perdido la cuenta de cuántas veces ha disparado su cámara pero no se olvida de muchas anécdotas ni de las "personas humildes" que han pasado por delante de su cámara. "Lo que más me enriquece es hacer fotos a personas humildes", reconoce antes de mirar al horizonte, que llega cargo de nuevos proyectos. Recientemente ha sido nombrado embajador de Profoto Global en España y Portugal y uno de los trainer de la marca, un nombramiento que le llevará a recorrer medio mundo para enseñar sobre iluminación. Y es que Gus no se cansa de compartir todo lo que sabe y por ello otro de sus proyectos es lanzar antes de final de año toda una serie de diez cursos on-line para España y América Latina sobre fotografía y con micropagos de cinco euros. Geijo no para, no hay tiempo para bajar la guardia y detrás de una sesión llega otra, y otra y otra. La cámara ya es una extensión de sus manos y sus ojos y miles de personas quieren saber cómo lo hace, pero aunque en el fondo la técnica importa por encima está la persona que donde pone el ojo, pone la foto. Como Gus Geijo.
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