León no puede presumir de estar a la cabeza en muchas cosas pero llegados a estas alturas creo que sí es consciente de que está a la cola en demasiados momentos por no haber llegado a tiempo o por no haber estado en el lugar adecuado en el instante preciso. Claro, que el consuelo que llaman de los tontos es pensar que por detrás de nosotros todavía quedan otras provincias en el vagón de cola nacional a las que miramos con la desazón de considerarlos unos pobrecitos.
La ensalada de colores salida de las urnas hace un mes, que podría haber sido mucho peor si no existiera aquello del mínimo de votos para optar a escaño, tiene muchos inconvenientes en clave nacional pero afortunadamente nos deja en tablas si pensamos en el espacio provincial. Por mucha insistencia que sigan poniéndole los leonesistas con el desgastado argumento de que un tío o dos con la purpurada en las Cortes Generales iban a solucionar los problemas de nuestra tierra de un plumazo.
UPL y el resto de partidos nacionalistas que siempre están en el medio, abiertos a pactar por un lado o por el otro según le convenga en cada momento como hacían los de la veleta naranja, es un partido de oportunistas por mucho que le vendan la moto diciéndole que es el voto de las oportunidades. La experiencia me dice que es así y cada vez, cada cita electoral, lo tengo mucho más claro.
De hecho, ni usted ni yo sabemos a estas alturas qué va a pasar en la Diputación de León porque no está claro si gobernarán unos, los otros o los del medio aprovechando la coyuntura y la situación de dependencia de los dos grandes para sacar tajada de alguna manera. Inversiones, propuestas y acuerdos leerá y oirá en los medios, pero usted ya me entiende por dónde van los tiros.
Es lo que tiene estar en el medio y no tener claro para dónde puede ondear la bandera en cada momento y desconocer los peajes que hay que pagar hasta que alguien se dé cuenta de que un partido con el 8 por ciento de los votos en una provincia en la que se cree determinante no es ni siquiera relevante. Y mucho menos opción para ser la locomotora que tire de este tren del que cada día se bajan más pasajeros.