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¡Por el nuevo año viejo!

30/12/2023
 Actualizado a 30/12/2023
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Una dama de setenta y nueve años ha desbancado, enfundada en un elegante vestido rojo pasión, a la todopoderosa Mariah Carey en la lista de sencillos estadounidenses en esta fechas. Se trata de Brenda Lee, que entonando su ‘rockin around the Christmas tree’ nos encandila con un jovial desparpajo de aires rockabillies, en un vídeo en YouTube, que a fecha de hoy ha alcanzado más de veinte millones de visualizaciones en poco más de un mes. En el videoclip la entrañable ancianita danza en complicidad con los miembros de la familia y con una amiga de edad similar, alternando estampas hogareñas en la cocina de un hogar o danzando incluso con el mismo Santa Claus en torno al crepitar del fuego de una chimenea. 

Ante la escena, un grupo de escolares de mi instituto admiraban embelesados a la dicharachera ancianita, mientras alguno decía ¡qué grande la abuela! 

La estampa recuerda a las célebres chicas de oro, aquellas cuatro alocadas féminas de distintos estatus y caracteres muy diversos, protagonistas de una comedia de situación que nos mantuvo deliciosamente entretenidos a miles de espectadores allá por los años ochenta: la suspicaz Dorothy, la desenfadada Blanche, aquella ácida abuelita llamada Sofía, y la ingenua Rose.

 Parece que la veteranía vuelve a enganchar, como también demuestra el anuncio de la más conocida de las corporaciones de comercio electrónica, que este año está protagonizado por tres intrépidas abuelitas que reciben como regalo sendos trineos con los que se lanzan, desde una inmensa cuesta nevada, arreboladas por la algarabía infantil centelleando en sus pupilas. Tres niñas de cabello de nieve deslizándose por la cuesta del tiempo. Un tiempo de trescientos sesenta y cinco días que ya parece viejo, porque se hunde en un pasado de hojas arrancadas al calendario de nuestros días, pero que se renueva porque sobre él construimos el ahora. 

Sobre nuestros instantes efímeros, que parecen haberse esfumado por los sumideros del tiempo, se ha ido fraguando el tesoro de la experiencia acumulada, el rico patrimonio de todo lo aprendido, de la vetustez sólida, sabia y serena, sin la cual toda novedad carecería de sentido. 

 A las puertas del año nuevo permitamos extender la mirada hacia atrás y contemplar esas manos cuarteadas y temblorosas aferradas al bastón, sus pies algo más vacilantes y los ojos acaso algo cansados de los días que precedieron. Están aquí y dan sentido a nuestro presente. Por tanto, un justo elogio a nuestros mayores en estas postreras horas de 2023. 

Imagínense agarrados de la mano de Brenda Lee brindando por el nuevo año alrededor de un árbol y como dice su villancico «bailando alegremente a la nueva manera antigua». 

 

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