El impacto de la Semana Santa

La relevancia de la Semana Santa en la provincia de León es ya una evidencia en todos los ámbitos. No sólo tiene que ver con la tradición y la religiosidad, con esa pasión que sienten los leoneses por participar de las procesiones de sus cofradías, ya sea como espectadores o como actores principales. Además, la Semana Santa tiene una importancia vital para la economía gracias fundamentalmente al auge del turismo, un sector que ha vivido un efecto rebote tras la pandemia y el año pasado registró su récord histórico en número de viajeros que pasaron por los alojamientos hoteleros y el dato más elevado de pernoctaciones desde el año 2007. Nuestra provincia se ha convertido en uno de los destinos más atractivos de toda España porque combina naturaleza, cultura, patrimonio y gastronomía. Esos potenciales están ahí durante todo el año, pero hay que reconocer que tienen un especial reclamo durante la Semana Santa, en la que casas rurales, hoteles, restaurantes, bares y demás establecimientos del sector se quedan pequeños y podrían generar aún mayor negocio en el que caso de tener otras infraestructuras. Y eso hace que se eleven los precios, tal y como publica hoy este periódico. Hasta ahora, la importancia de la Semana Santa para economía leonesa se había visto reflejada en estimaciones que siempre resultan en cierto modo excesivamente aventuradas, pero en los últimos años el mercado laboral y los datos turísticos ponen negro sobre blanco esa relevancia económica y confirman que ese impacto llega de verdad a la economía local. Lástima que sea sólo fruto de la estacionalidad que marca siempre el sector turístico y que se refleja en otro de los atractivos de nuestra Semana Santa, que no es otro que el hecho de que León se llena de leoneses retornados que no han podido encontrar aquí un empleo.