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Debate, aspectos generales

02/02/2022
 Actualizado a 02/02/2022
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Tudanca, nombra en tres ocasiones El Bierzo, pero ubica la Ciudad de la Energía en León; Igea, hace viral su discurso de ‘ternerillos y garrapatas’ y Mañueco, enciende las redes con referencias a su maquillaje.

Estas son alguna de las cuestiones que se vieron en bambalinas durante el debate televisado.

El debate estuvo estructurado en dos tiempos, claramente diferenciados.

Una primera parte en la que los candidatos eligieron el mensaje negativo, inoculando veneno y buscando la confrontación; y una segunda parte de transición con un mensaje preparado y estructurado por los respectivos equipos de campaña; en esta parte se sostuvo un mensaje positivo por los ponentes, hablando de los asuntos que importan a los ciudadanos y hablando de futuro y proyecto. Dos políticos profesionales, Mañueco y Tudanca, y un profesional metido a político, Igea, intentaron persuadir al votante indeciso mediante el espectáculo mediático.

Mañueco

Encorsetado y más estático, supo sacar partido a su posición de favorito. Esquivó muchos de los temas que más le podían afectar, pero se generaron dudas respecto a cuestiones de transparencia en la adjudicación de contratos. Eslogan bien estructurado al final de su minuto de oro: Lo mejor está por venir.

Tudanca

Inteligente al quedarse al margen del enfrentamiento de PP y Cs, antiguos socios de Gobierno; supo pedir el voto con énfasis, pero se quedó débil en un discurso sin fuerza; apelando al cambio, mismo mensaje del PSOE desde hace años; por lo que el eslogan de campaña «cambio y esperanza» quedó cojo.

Igea

El más experto en el discurso, y cómodo en el debate, evitó los nervios del plató televisivo, pero perdió el control en algunos momentos, con chascarrillos y risas demasiado marcadas. Gran conocedor de su cargo, supo sacar partido al espacio sobre la sanidad en el que fue claro ganador; su momento álgido: llamar tránsfuga a Mañueco. Erró en una ocasión, llamando presidente a Mañueco… será la costumbre. Eslogan duro y dirigido directamente al PP: Honestidad o mentira.

Sin un claro ganador:

En general, discurso pobre de los tres candidatos, que, si bien no estuvieron encorsetados, no aportaron nada nuevo. Faltos del arte del discurso, faltaron: latiguillos, tropos, metáforas y herramientas discursivas. El mayor error de un candidato y su equipo de campaña, es no saber escuchar, y en esta campaña sigue faltando el ‘feedback’ entre gobernantes y gobernados.

Los seguidores no se compran, se conquistan. Hay que apelar al corazón, pero también a la razón.

Como nota periodística:

Antes, los periodistas comían con los políticos; ahora, estos se los comen a ellos.

Frase sobre lo que está por venir en campaña:

‘Mortis tua, vita mea’. Tu pierdes, yo gano.

Pedro Villanueva es politólogo.
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