Cristina Vega 2

Aquel día del apagón

06/05/2025
 Actualizado a 06/05/2025
Guardar

Una semana ha pasado ya desde el 28 de abril, fecha que quedará grabada en nuestra memoria como el día del apagón.

Protagonista absoluto de la actualidad informativa y las conversaciones cotidianas. Todos tenemos anécdotas que compartir sobre esas horas en las que retrocedimos unas cuantas décadas. Nos vimos sin luz, internet, telecomunicaciones y en algunos casos incluso sin agua.

Se generó un ambiente que rozaba lo apocalíptico, en especial en las ciudades donde no funcionaban los semáforos, los cajeros, los datáfonos, los ascensores…

Una vorágine que envolvió y empujó a la gente en masa a comprar, hasta agotar existencias, comida, linternas, pilas, velas, radios…

Transcurrida una semana seguimos sin tener una información clara y fiable sobre las causas de tal desaguisado. Simples conjeturas, diversas teorías y posibles explicaciones.

Precisamente esa ignorancia, sumada a los bulos que se convierten en pólvora mediante redes sociales, le ha añadido al asunto una dosis extra de incertidumbre e inseguridad.

Se imponen un par de preguntas, como casi siempre después de algún acontecimiento que nos demuestra lo frágiles y dependientes que somos, ¿volverá a suceder? y ¿qué hemos aprendido de esas horas de apagón?

La primera no tiene una respuesta segura.

Para la segunda tal vez haya más de una observación digna de anotar.

Nos quedó claro una vez más que los pueblos y zonas rurales suelen estar inmunizados contra el caos. Existen planes alternativos que evitan que un incidente así trastoque la rutina, al menos en lo esencial para vivir.

También pudimos constatar que el pánico y la histeria son tan inevitables como contagiosos y malos consejeros.

Otra conclusión que pudimos extraer es que las tiendas de barrio y los pequeños comercios ejercieron de salvavidas ante la imposibilidad de utilizar las tarjetas, de sacar dinero efectivo de los cajeros o de desplazarse hasta las grandes superficies.

Parece que cuando se apaga la tecnología tiende a encenderse y valorarse la humanidad.

Archivado en
Lo más leído