Al presidente de La Venatoria

José Manuel Pérez
07/07/2019
 Actualizado a 19/09/2019
El día 10-10-2018 se celebró una asamblea general extraordinaria con un único punto del orden del día: Propuesta de aprobación de la modificación del proyecto de adecuación de vestuarios, gimnasio y zona termal, incluyendo reordenación de zonas verdes y deportivas, su financiación y ejecución.

Esta obra dio comienzo oficialmente el día 24-12-2018, con un mes y medio de retraso sobre la fecha prevista y en pleno invierno, cuando todos los técnicos desaconsejan realizar la cimentación y la estructura debido a las heladas que pueden afectar al hormigón empleado y su resistencia. La fecha comprometida para finalizar la obra fue exactamente el 15-6-2019 y las responsabilidades que iban a asumir eran la dimisión, según sus propias palabras expresadas a todos los socios y reflejadas en el acta de esta asamblea. Acta que no está expuesta ante todos los socios en el tablón de anuncios, tal y como exigen nuestros estatutos, porque el secretario afirma que es inviable la exposición de la misma por su extensión.

Hemos sobrepasado el 15-6-2019 y ya llevamos 22 días de la temporada de verano. La temporada más importante de nuestra sociedad y en la que la mayoría de los ocho mil setecientos socios intentamos disfrutar todo lo posible de nuestras instalaciones, junto con nuestras familias y amistades. La situación real de las instalaciones es una obra a medio construir, ocupando toda la parte delantera de la piscina infantil y mediana. La pradera grande ocupada en una parte muy importante por una calle construida para el paso de camiones, que circulan por ella hasta la obra y que parten la pradera en dos partes, no permitiendo el paso de una parte a otra al estar vallada. A pesar de que esta calle está vallada, existe un paso libre desde el pasillo de acceso hasta la pradera y que podría originar un desgraciado accidente al paso de los camiones y otros vehículos. El riesgo es muy alto por el elevado número de niños jugando libres en las praderas. Normalmente es complicado encontrar un sitio libre para colocar las sillas y las mesas, pero este año va a ser imposible al estar ocupadas una parte muy importante de las praderas. El nuevo edificio está a medio construir y la continuación de la obra provoca ruidos, polvo y movimientos continuos de personal y material de construcción. Incompatibles con socios queriendo disfrutar de las instalaciones y un merecido descanso. Esta situación catastrófica para la sociedad en su temporada más importante del año, y que se prolongará durante todo el verano, exige que ustedes DIMlTAN, tal y como se comprometieron ante todos los socios.

Dimitan y dejen paso a una gestora que solucione esta catástrofe que ustedes han provocado y que son incapaces de resolver.
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